Más de 200 detenidos en Pakistán, entre ellos un británico vinculado a Al Qaeda

La policía de Pakistán ha detenido a más de 200 personas en una serie de redadas por su posible relación con los atentados de Londres o con Al Qaeda desde que Islamabad confirmó que tres de los suicidas visitaron el país en los últimos meses. Entre los arrestados puede encontrarse una figura clave en el Reino Unido de la red de Osama bin Laden, Haroon Rashid Aswad, del que las fuerzas de seguridad sospechan que inspiró, o incluso organizó, el 7-J. Aswad, de unos 30 años, es un británico de origen paquistaní que nació en Dewsbury, la misma localidad de los alrededores de Leeds donde vivía el je...

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La policía de Pakistán ha detenido a más de 200 personas en una serie de redadas por su posible relación con los atentados de Londres o con Al Qaeda desde que Islamabad confirmó que tres de los suicidas visitaron el país en los últimos meses. Entre los arrestados puede encontrarse una figura clave en el Reino Unido de la red de Osama bin Laden, Haroon Rashid Aswad, del que las fuerzas de seguridad sospechan que inspiró, o incluso organizó, el 7-J. Aswad, de unos 30 años, es un británico de origen paquistaní que nació en Dewsbury, la misma localidad de los alrededores de Leeds donde vivía el jefe del comando suicida, Mohamed Sidique Khan.

Varias fuentes de los servicios de espionaje paquistaníes confirmaron ayer a Reuters la detención de Aswad, pero no durante las redadas que comenzaron el martes, sino el pasado fin de semana, cuando se realizaron los primeros arrestos. El número de teléfono del sospechoso figuraba en los móviles de los suicidas; pero como llevaba documentación falsa su identidad real ha tardado varios días en ser descubierta. "No tenemos a nadie llamado Haroon Rashid", aseguró, sin embargo, el ministro de Información paquistaní, Rashid Ahmed, a Reuters, que mantuvo la veracidad de su información.

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Aswad, buscado por las policías británica y estadounidense desde hace tiempo como líder de Al Qaeda en el Reino Unido, llevaba unos 20.000 euros en metálico cuando fue detenido y, según publicó anoche el vespertino londinense Evening Standard, ya estaba siendo interrogado por agentes del Reino Unido.

Preguntado durante su comparecencia parlamentaria por la importancia de Pakistán en la investigación de los atentados, el primer ministro, Tony Blair, aseguró que no podía comentar el trabajo policial, aunque reconoció haber mantenido ayer una conversación telefónica con el presidente paquistaní, Pervez Musharraf. "Compartimos el deseo de arrancar de raíz el mal que propagan esas madrazas tanto en el Reino Unido como en otros países", señaló Blair.

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