Greenpeace dice que Medio Ambiente da trato de favor a Barcelona por el zoo marino

La entidad ecologista Greenpeace denunció ayer que el Ayuntamiento de Barcelona recibe un "trato privilegiado" de la Dirección General de Costas del Ministerio de Medio Ambiente porque le autorizó a construir el zoo marino. "No sólo eso", añadió la coordinadora de Greenpeace en Cataluña, Anna Rosa Martínez, "ya hemos visto que el Ayuntamiento ejerce mucha influencia porque se invertirán 62 millones de euros en la regeneración de playas y se construirán 25 espigones".

A juicio de la organización, el zoo es además insostenible, y Martínez tachó de "nefasta" la autorización de su construcc...

La entidad ecologista Greenpeace denunció ayer que el Ayuntamiento de Barcelona recibe un "trato privilegiado" de la Dirección General de Costas del Ministerio de Medio Ambiente porque le autorizó a construir el zoo marino. "No sólo eso", añadió la coordinadora de Greenpeace en Cataluña, Anna Rosa Martínez, "ya hemos visto que el Ayuntamiento ejerce mucha influencia porque se invertirán 62 millones de euros en la regeneración de playas y se construirán 25 espigones".

A juicio de la organización, el zoo es además insostenible, y Martínez tachó de "nefasta" la autorización de su construcción porque a su juicio supone un retroceso "en la política de protección de las costas" del Gobierno central. "Ahora se permite construir en ellas alegando un supuesto interés público", lamentó. "El zoo supondrá la privatización del espacio y poner límites al acceso al mar", añadió.

Martínez recordó que sólo se puede permitir la ocupación del dominio público cercano al mar para las actividades que no puedan tener otra ubicación. La coordinadora de Greenpeace añadió: "Este no es el caso y sienta un precedente grave porque otras administraciones pueden alegar interés público para ocupar su costa", informa Efe.

Esta construcción, junto al recinto del Fórum y al puerto deportivo, suponen que el informe considere que Barcelona sea uno de los "puntos negros" del litoral catalán. "Los espacios se tienen que regenerar, y lo que se ha hecho en esta zona es simplemente cubrirla con cemento", agregó Martínez. Y ello, apunta el estudio, perjudica a la actividad pesquera. "Sin duda han ganado espacio, pero artificial. Además, en la zona hay la planta incineradora, y creemos que una infraestructura de estas características no es necesaria si la ciudad realiza una gestión correcta de los residuos", remachó.