Selectividad en Motril
Los alumnos que se han presentado a las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) en el IES Francisco Javier de Burgos, de Motril, después de aprobar con mayor o menor esfuerzo un intenso curso de 2º de Bachillerato, no han hecho méritos, por lo visto, para escribir sus exámenes en una simple mesa. Lo han hecho sobre un tablero, en un salón de actos, a pesar de que los miembros de la Sede número 11 del Tribunal de las PAU tenían a su disposición todas las aulas del centro, ya que las clases se habían suspendido esos días.
No sé si esto en otras materias carece de importancia, aunque los ...
Los alumnos que se han presentado a las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) en el IES Francisco Javier de Burgos, de Motril, después de aprobar con mayor o menor esfuerzo un intenso curso de 2º de Bachillerato, no han hecho méritos, por lo visto, para escribir sus exámenes en una simple mesa. Lo han hecho sobre un tablero, en un salón de actos, a pesar de que los miembros de la Sede número 11 del Tribunal de las PAU tenían a su disposición todas las aulas del centro, ya que las clases se habían suspendido esos días.
No sé si esto en otras materias carece de importancia, aunque los compañeros con los que he hablado del asunto piensan lo contrario y así se manifestó en una reunión del claustro de profesores de mi entro en el primer trimestre de este curso académico. Desde luego, para las materias de Latín y Griego, que son las que yo imparto, es absolutamente inadecuado y espero que esta protesta que hago pública le sirva al máximo responsable de las PAU para tomar las medidas oportunas y corregir en el futuro este grave error.
No entiendo por qué hay que someter a los alumnos a más dificultades de las que las pruebas en sí ya suponen. En este sentido, el miércoles 15 de junio, al comenzar la prueba de Griego, le manifesté al secretario de la Sede número 11 que instar a los alumnos a realizar un examen en un asiento del salón de actos, con un tablero sobre los brazos del mismo donde albergar diccionario, folios, cuestionario y bolígrafo era, cuando menos, un descuido inaceptable; y le expuse, asimismo, que no entendía por qué se daba esa situación cuando el curso anterior el examen ya se había hecho en un aula con sus mesas normales.
Pero el jueves 16 la prueba de Latín se hizo en las mismas condiciones, y al expresarle mi extrañeza, el secretario apeló entonces a que "el Tribunal es soberano en sus decisiones".
Supongo que los soberanos miembros del Tribunal no trabajarán en sus casas o en sus despachos sobre los cómodos "tablerillos".
¿Qué ocurrirá en septiembre? ¿Y en próximos cursos? ¿Se han dado situaciones parecidas en otros tribunales.