Interior y las diputaciones movilizan a más de mil personas contra la ola de frío

El temporal de nieve y frío polar que se abatió ayer con toda su crudeza sobre el País Vasco y Navarra, y que está previsto que continúe al menos los próximos dos días ha obligado a Interior y a las tres diputaciones y los principales ayuntamientos a movilizar a más de mil personas, junto a numerosos equipos técnicos, para resolver en lo posible las múltiples afecciones a los ciudadanos y garantizar el tránsito por las carreteras.

Las principales complicaciones viales se registraron ayer en las carreteras y puertos de montaña de Álava, donde la Ertzaintza y la Diputación lograron mante...

El temporal de nieve y frío polar que se abatió ayer con toda su crudeza sobre el País Vasco y Navarra, y que está previsto que continúe al menos los próximos dos días ha obligado a Interior y a las tres diputaciones y los principales ayuntamientos a movilizar a más de mil personas, junto a numerosos equipos técnicos, para resolver en lo posible las múltiples afecciones a los ciudadanos y garantizar el tránsito por las carreteras.

Las principales complicaciones viales se registraron ayer en las carreteras y puertos de montaña de Álava, donde la Ertzaintza y la Diputación lograron mantener abierta a duras penas la red principal, aunque buena parte del resto de las vías quedaron colapsadas. Todos los puertos permanecieron cerrados, salvo el de Azaceta, donde se pudo circular con precaución.

La nieve y la fuerte ventisca que azotó Álava ocasionó importantes problemas en la N-I, la principal vía que une España con Francia a través del País Vasco. Permaneció cortada de forma intermitente durante el día debido a varios accidentes, especialmente en el tramo entre Vitoria y Salvatierra en dirección a San Sebastián. Desde primeras horas de la tarde, la Ertzaintza prohibió incluso circular a los camiones con cadenas.

La A-68 entre Vitoria y Bilbao no escapó al rigor del temporal. A la caída de la tarde había largas retenciones en Koartango tras quedar cruzado un camión. La Diputación usó a 70 personas y 23 quitanieves y tractores.

Las líneas de autobús a los pueblos que no circulan por la red principal se suspendieron, al igual que varios servicios de Cercanías de Renfe. Incluso la UPV tuvo que suspender exámenes en el campus de Álava durante esta semana. En Vitoria, muy castigada por la ola de frío, los bomberos esparcieron 70 toneladas de sal y el Ayuntamiento desplegó a casi 500 trabajadores para luchar contra la nieve. La Policía Local recibió órdenes de recoger a cualquier indigente que durmiese en la calle y le trasladara a los centros de acogida. Varios colegios dieron la tarde libre a sus alumnos, tanto en la capital como en pueblos de la provincia.

En Navarra, el temporal causó problemas de comunicación a pesar de la intervención de 62 máquinas quitanieves y el trabajo coordinado de la Policía Foral de Tráfico, la Guardia Civil y el consorcio de bomberos.

El tráfico en la red principal fue fluido. La autopista AP-15, la autovía de Sakana y el cinturón viario de Pamplona y su comarca permanecieron abiertos todo el día. En muchos puertos de la red secundaria hubo que utilizar las cadenas.La normalidad fue la tónica dominante en los mercados de abastos, las empresas y los centros docentes de Navarra, si bien la presencia de trabajadores y alumnos se redujo en áreas como Tierra Estella y Sakana o la zona norte y pirenaica. Renfe suspendió los trenes regionales a Vitoria. En el aeropuerto de Noain hubo que retirar el hielo de la pista y se canceló un vuelo procedente de Madrid por motivos no vinculados a la meteorología. La intensidad del temporal llevó a los gruistas navarros en huelga a suspender temporalmente su paro para garantizar la seguridad de las carreteras.

La complicación de la situación en toda Álava, donde anoche seguía nevando con intensidad, obligó a las instituciones a declarar la situación de emergencia.

En Guipúzcoa, la situación fue cambiante a lo largo del día. Las playas de San Sebastián amanecieron cubiertas por un manto de nieve, aunque ésta desapareció a media mañana. La autovía de Navarra (A-15) permaneció cortada varias horas hacia Pamplona por la aparición de placas de hielo, aunque a partir del mediodía quedó despejada. En Etxegarate también hubo que prohibir momentáneamente el paso en dirección a Vitoria al quedar cortado un camión que realizó la tijera. La Diputación echó mano de todos sus recursos humanos y técnicos para hacer frente a esta situación: 105 operarios, 28 quitanieves y 2.300 toneladas de sal.

En el aeropuerto de Hondarribia no se canceló ningún vuelo; sólo un avión procedente de Barcelona llegó con retraso. Los pescadores de Pasaia permanecieron amarrados a puerto, al menos hasta media tarde. No hubo ningún problema de abastecimiento en comercios y grandes superficies, y la actividad en los centros educativos discurrió con absoluta normalidad. El Gobierno foral decidió dar por terminada desde hoy, con cinco días de adelanto, la temporada de caza.

En Vizcaya, la red de carreteras estuvo transitable toda la jornada y sólo hubo problemas puntuales a primeras horas de la mañana en los puertos de Trabakua y Areitio. En los accesos a Bilbao desde el Txorierri hubo problemas a primeras horas y varios colegios de esa zona se cerraron por los problemas de acceso. Educación aseguró que todos los centros escolares públicos funcionaron con normalidad y únicamente se registraron inconvenientes en Orozko y Zalla. En el aeropuerto de Loiu se retrasaron tres vuelos (dos a Madrid y otro a Frankfurt) por la tormenta eléctrica desatada cuando se aproximaban tres aviones.

Información elaborada con los datos facilitados por Eduardo Azumendi, Mikel Muez, Mikel Ormazabal y Alberto Uriona.