La Generalitat afirma que el proceso catalán "es paralelo pero distinto"

Ante la aprobación del plan Ibarretxe, el Gobierno de la Generalitat catalana emitió ayer un breve comunicado en el que señala que la vía seguida en Cataluña es diferente a la utilizada en el País Vasco.

El comunicado hace dos "apreciaciones". En la primera, el Gobierno de la Generalitat "expresa su respeto por el debate que se ha producido en un parlamento formado por representantes políticos elegidos en una votación libre y democrática".

En la segunda apreciación indica que "la elaboración del nuevo Estatuto de Cataluña tiene una personalidad, una vía de desarrollo y un ...

Ante la aprobación del plan Ibarretxe, el Gobierno de la Generalitat catalana emitió ayer un breve comunicado en el que señala que la vía seguida en Cataluña es diferente a la utilizada en el País Vasco.

El comunicado hace dos "apreciaciones". En la primera, el Gobierno de la Generalitat "expresa su respeto por el debate que se ha producido en un parlamento formado por representantes políticos elegidos en una votación libre y democrática".

En la segunda apreciación indica que "la elaboración del nuevo Estatuto de Cataluña tiene una personalidad, una vía de desarrollo y un calendario de actuaciones propios. Los procesos de mejora del autogobierno emprendidos en diversas comunidades son paralelos pero distintos".

De los tres partidos que forman el Gobierno presidido por Pasqual Maragall, sólo uno, Esquerra Republicana (ERC), se felicitó por el resultado de la votación en el Parlamento vasco. Dirigentes de los otros dos partidos, el PSC e Iniciativa Verds (ICV), señalaron que el plan Ibarretxe está lastrado por el hecho de no contar con un consenso social y político suficientemente amplio.

Por otra parte, el coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, reconoció a Europa Press la "legitimidad" de la aprobación del plan Ibarretxe en el Parlamento vasco, aunque advirtió de que no apoyará su toma en consideración cuando llegue a las Cortes por entender que carece del consenso social y político necesario para un nuevo Estatuto y que ya se dio con el actual Estatuto de Gernika.