El metro llegará al Ensanche de Vallecas al menos un año antes que los vecinos

La prolongación de la línea 1 del metro al Ensanche de Vallecas tendrá tres paradas, 3.100 metros de túnel y un coste de 86,6 millones. Pero lo que convierte a esta obra pública en una excepción en la red del suburbano son otras cosas. La primera es que una cuarta parte de su coste no lo pagará la Comunidad, sino los dueños del suelo (dos de ellos, organismos públicos) sobre el que deben edificarse 26.000 pisos. La segunda, que el metro llegará al barrio al menos un año antes que sus vecinos, ya que el retraso en la construcción de las viviendas impedirá que lo habiten hasta 2008 o 2009.
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La prolongación de la línea 1 del metro al Ensanche de Vallecas tendrá tres paradas, 3.100 metros de túnel y un coste de 86,6 millones. Pero lo que convierte a esta obra pública en una excepción en la red del suburbano son otras cosas. La primera es que una cuarta parte de su coste no lo pagará la Comunidad, sino los dueños del suelo (dos de ellos, organismos públicos) sobre el que deben edificarse 26.000 pisos. La segunda, que el metro llegará al barrio al menos un año antes que sus vecinos, ya que el retraso en la construcción de las viviendas impedirá que lo habiten hasta 2008 o 2009.

"Este metro sólo servirá durante años para visitar los terrenos donde deben construirse nuestras casas", protestaron algunos vecinos, el pasado julio, durante un acto de la presidenta regional, Esperanza Aguirre. La asociación PAU del Ensanche de Vallecas calificó de "irónico" el hecho de que el metro vaya a estar finalizado a finales de 2006 o principios de 2007, mientras los vecinos no ocuparán sus pisos hasta 2008 o 2009.

La línea 1 del metro, que recorre la capital desde la plaza de Castilla hasta Congosto, en Villa de Vallecas, será prolongada en dirección sureste. Recorrerá en diagonal el Ensanche de Vallecas, bajo el asfalto del futuro eje central del nuevo barrio. Como sus calles aún no han sido bautizadas, este eje central aún figura en el proyecto con su nombre técnico: vial 6.

La estación de Congosto será remodelada y en sus cocheras estará el principio de la prolongación. Desde allí, el túnel trazará una curva abierta al este hasta alcanzar el vial 6. Justo antes estará situada la primera estación, bajo un parque trazado en diagonal en una manzana ocupada por zonas verdes.

Esta estación, situada a 900 metros al sureste de Congosto, tendrá un vestíbulo y dos accesos al parque, uno de ellos con ascensor. Unos 200 metros más adelante el metro cruzará bajo la M-45. La segunda estación de la prolongación estará medio kilómetro después, en el centro del Ensanche, en la intersección del vial 6 con una calle transversal aún sin nombre.

Esta parada discurrirá bajo una zona verde y contará con dos vestíbulos, con una boca cada uno. También estará equipado con ascensor. La tercera estación estará a 700 metros, en otro parque que ocupará dos manzanas en la esquina entre el vial 6 y la Gran Vía del Sureste. Tendrá las mismas características que la estación anterior.

Los 3,1 kilómetros de este trazado van a ser excavados con las tuneladoras que abrieron los túneles del Metrosur. Éstos tienen un diámetro de 9,4 metros, recubiertos en su interior por anillos de hormigón armado. El diámetro del interior del anillo, en el que serán instaladas las vías y circularán los trenes, es de 8,3 metros.

El novedoso modelo de financiación de esta línea, que Aguirre está tratando de extender al metro ligero del oeste de la capital, consiste en que contribuyan a pagarlo las entidades que se beneficiarán de su puesta en funcionamiento.

En este caso, se trata de los seis propietarios -dos públicos (el Ivima y la EMV) y cuatro privados- del suelo del Ensanche, que han visto revalorizado su precio con la prevista llegada del metro. En total, los seis se harán cargo de 24 de los 86,6 millones (un 27%) que costará el proyecto.