Tanatorio de Sevilla
Los trabajadores del Tanatorio SE-30 estamos inmersos en un prolongado conflicto laboral, en el que ha habido 10 despidos y varias jornadas de huelga. Conflicto que ha tenido en los medios de comunicación una expresión que no siempre ha correspondido a la realidad de los hechos.
Durante este conflicto se han vertido algunas acusaciones sobre el funcionamiento de nuestro centro que ponen en duda nuestra profesionalidad y buen hacer, y que suponen una campaña negativa que puede poner en peligro nuestros puestos de trabajo. Incluso algunos han llegado a pedir a las autoridades municipales ...
Los trabajadores del Tanatorio SE-30 estamos inmersos en un prolongado conflicto laboral, en el que ha habido 10 despidos y varias jornadas de huelga. Conflicto que ha tenido en los medios de comunicación una expresión que no siempre ha correspondido a la realidad de los hechos.
Durante este conflicto se han vertido algunas acusaciones sobre el funcionamiento de nuestro centro que ponen en duda nuestra profesionalidad y buen hacer, y que suponen una campaña negativa que puede poner en peligro nuestros puestos de trabajo. Incluso algunos han llegado a pedir a las autoridades municipales el cierre cautelar de nuestro centro, lo que supondría la pérdida de 100 puestos de trabajo.
Queremos dirigirnos a la opinión pública para desmentir esas acusaciones y defender nuestros puestos de trabajo. Todo ello desde la solidaridad con los compañeros despedidos y desde la petición a la empresa de que se abra un proceso de negociación que dé la mejor solución posible a la situación de estos compañeros, pero también desde el convencimiento de que un cierre no supone ninguna solución para ellos y supone unos 100 despidos más.
Queremos decir a los sevillanos que las acusaciones de prácticas irregulares en nuestro tanatorio no son ciertas. La práctica funeraria en nuestro tanatorio se ajusta a las reglas comúnmente admitidas, y los profesionales que la llevamos a cabo hemos sido formados para ello y lo hacemos con profesionalidad y buena voluntad. Y cualquiera de los mecanismos legales de inspección puede certificarlo.
Por eso pedimos que cese la campaña de boicot y propaganda negativa contra nuestro centro, de cuyo mantenimiento depende el pan de 100 familias, y pedimos a las autoridades que intervengan para mediar en el conflicto, desde la defensa de los puestos de trabajo y rechazando radicalmente toda propuesta de cierre.