Álvarez cree que el AVE a Lleida no podrá circular a la velocidad que prometió Cascos

El tren de alta velocidad que une Madrid y Lleida, uno de los proyectos estrella del PP, no tiene pinta de que vaya a circular nunca a la velocidad de 350 kilómetros por hora que prometió en su día el ex ministro de Fomento Francisco Álvarez-Cascos. Ésa es la conclusión que se desprende de los primeros estudios realizados sobre esta línea. La ministra Álvarez no descartó del todo la posibilidad de que se pueda alcanzar esta velocidad punta, pero mostró grandes dudas: "Ahora alcanza 200 kilómetros por hora, puede llegar en el futuro a 250 o incluso a 300, pero no creo que alcance nunca l...

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El tren de alta velocidad que une Madrid y Lleida, uno de los proyectos estrella del PP, no tiene pinta de que vaya a circular nunca a la velocidad de 350 kilómetros por hora que prometió en su día el ex ministro de Fomento Francisco Álvarez-Cascos. Ésa es la conclusión que se desprende de los primeros estudios realizados sobre esta línea. La ministra Álvarez no descartó del todo la posibilidad de que se pueda alcanzar esta velocidad punta, pero mostró grandes dudas: "Ahora alcanza 200 kilómetros por hora, puede llegar en el futuro a 250 o incluso a 300, pero no creo que alcance nunca los 350 kilómetros anunciados por el PP".

La razón esgrimida por Magdalena Álvarez: "la configuración del trazado de esta vía". Y añadió: "premura en la toma de decisiones". Además, consideró "lejos de la realidad" el objetivo de que el AVE llegue a Barcelona en 2004, aunque no dio ninguna fecha para su estreno. Tampoco descartó una revisión general del programa de alta velocidad ferroviaria, en función de lo avanzados que se encuentren los proyectos.

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En la primera comparecencia de la ministra en la Comisión de Fomento y Vivienda del Congreso, que se prolongó más de cinco horas, Álvarez y el portavoz de Infraestructuras del PP, Andrés Ayala, protagonizaron un debate sobre la distinta política de obra pública y transportes que defienden los partidos a que pertenecen, suscitado en torno a unas tijeras.

El diputado popular ofreció este instrumento a la ministra con el deseo de que las utilizara para cortar cintas y no para recortar las inversiones. Álvarez las rechazó por considerar que era Ayala el que debía "cortar" aspectos de su discurso, sobre todo cuando resaltó la actuación en infraestructuras del PP.

"Sólo nos hemos encontrado con desorden y caos", dijo Álvarez, por la "inexistencia" de un plan de infraestructuras aprobado por el Gobierno y el Congreso y por la falta de planificación que, a su juicio, guió la actuación de su predecesor.

Baja ejecución ferroviaria

A continuación, la ministra de Fomento proporcionó cifras poco alentadoras sobre el estado de ejecución del programa de alta velocidad ferroviaria: la línea Madrid-Valladolid (ejecutado un 31%), variantes del Pajares (0,3%), Córdoba-Málaga (36%), la Y vasca (0%), Madrid-Levante (1,56%), Madrid-Lisboa (0%), Valencia-Santander (0%) y Murcia-Almería (0,9%).

La ministra también se comprometió a desarrollar una red de alta velocidad complementaria "y no superpuesta" a la convencional, para la que además diseñará un plan de mantenimiento a ocho años "con el que recupere el grado de fiabilidad, calidad y seguridad", mediante el que se intentarán eliminar los 4.509 pasos a nivel que actualmente existen.

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