Una familia volcada en las tradiciones

Un padre y cinco hijos, unidos por su defensa y dedicación al periodismo, a la lengua española y a la información más libre. Una familia dedicada a atender a un pueblo ávido de información y de una información de calidad. Es la estirpe Ferré, dueños y responsables del periódico puertorriqueño El Nuevo Día.

El cabeza de familia, Antonio Luis Ferré, de 70 años, acompañado de su hija María Eugenia, presidenta de la empresa editora del diario, recibieron ayer el premio Ortega y Gasset a la mejor labor informativa en 2004 por la calidad profesional del rotativo, su importante difusión...

Un padre y cinco hijos, unidos por su defensa y dedicación al periodismo, a la lengua española y a la información más libre. Una familia dedicada a atender a un pueblo ávido de información y de una información de calidad. Es la estirpe Ferré, dueños y responsables del periódico puertorriqueño El Nuevo Día.

El cabeza de familia, Antonio Luis Ferré, de 70 años, acompañado de su hija María Eugenia, presidenta de la empresa editora del diario, recibieron ayer el premio Ortega y Gasset a la mejor labor informativa en 2004 por la calidad profesional del rotativo, su importante difusión y su papel en la promoción de la lengua española en Puerto Rico, donde se edita.

El Nuevo Día es el diario líder y de mayor influencia y prestigio de Puerto Rico. El padre de Antonio Luis Ferré adquirió la cabecera del periódico Día en 1940, un diario local de la ciudad de Ponce. Fue en 1970, en el mes de mayo, cuando Antonio Luis Ferré compró a su padre el periódico que fue rebautizado como El Nuevo Día y, además de convertirse en un periódico nacional, comenzó una profunda transformación gráfica, fotográfica y de formato. Hoy, El Nuevo Día, dirigido por Luis Alberto Ferré, otro de los hijos, tiene una tirada de 204.000 ejemplares diarios y 250.000 los domingos. Con 180 trabajadores de plantilla -60 reporteros y 24 fotógrafos-, El Nuevo Día es el orgullo de toda una familia, cuya misión, aseguran, es la defensa y la transmisión de los valores culturales del español en Puerto Rico.

Padre e hija no podían ni querían ayer ocultar su alegría por el premio recibido. "Es todo un reconocimiento a la labor periodística que cubre los temas esenciales de una sociedad moderna", aseguraba Antonio Luis Ferré. Su hija María Eugenia ponía el acento en la defensa de las tradiciones culturales y la transmisión a las nuevas generaciones de un espíritu que aboga por la defensa del medio ambiente, la calidad de vida y "el uso del español en un territorio que es parte de los Estados Unidos". "Hemos mantenido vivo y pujante el español en Puerto Rico. Allí el inglés es el idioma de los negocios, mientras que el español es el idioma que está más cerca del corazón, en el que piensa, reza y compone poesías el pueblo de Puerto Rico", dijo.

Los Ferré tienen el don de trasladar ese admirable espíritu familiar, que se afanan en cultivar, y de defensa de los valores democráticos a todos los estamentos del periódico. La nueva generación, compuesta de momento por 11 nietos, está siendo educada en este ambiente. De eso sí que se siente especialmente orgulloso Antonio Luis Ferré.