La ponencia del 'plan Ibarretxe' se abre a agentes ajenos a la Cámara
El PP y el PSE acusaron ayer al tripartito de utilizar la ponencia que debe debatir las enmiendas parciales al plan Ibarretxe para dilatar su discusión, con el su ritmo a las conveniencias electorales del PNV. "El plan Ibarretxe es una rémora del pasado con la que nadie sabe qué hacer en la nueva etapa y el PNV quiere ganar tiempo y adecuar el debate a su calendario electoral", dijo el socialista Jesús Eguiguren, que calificó de "sucedáneo" del verdadero debate que debería darse al que va a tener lugar en la ponencia, y que ayer se decidió abrir a intervenciones externas a la Cám...
El PP y el PSE acusaron ayer al tripartito de utilizar la ponencia que debe debatir las enmiendas parciales al plan Ibarretxe para dilatar su discusión, con el su ritmo a las conveniencias electorales del PNV. "El plan Ibarretxe es una rémora del pasado con la que nadie sabe qué hacer en la nueva etapa y el PNV quiere ganar tiempo y adecuar el debate a su calendario electoral", dijo el socialista Jesús Eguiguren, que calificó de "sucedáneo" del verdadero debate que debería darse al que va a tener lugar en la ponencia, y que ayer se decidió abrir a intervenciones externas a la Cámara.
"No hay enmiendas para más de tres o cuatro reuniones", dijo el popular Leopoldo Barreda, que se opuso a esas intervenciones ajenas a los grupos parlamentarios. Barreda interpreta que el tripartito desvirtúa con ello la legitimidad de la Cámara, al dar a entender que "hay otras legitimidadades" que se tienen que integrar en el debate, "como si el Parlamento no fuera suficientemente representativo de la voluntad popular". El PSE, pese a su desacuerdo, no se opuso "por cortesía parlamentaria", según dijo Eguiguren.
A propuesta del representante en la ponencia del PNV, Joseba Egibar, ayer se adoptó la decisión de invitar a todas las personas que comparecieron en la Comisión de Autogobierno en 2002, a remitir sus "aportaciones" por escrito antes del 30 de abril y comparecer luego si lo desean "para enriquecer el debate". Ello permitirá al tripartito alargar a su conveniencia el debate del proyecto de ley y es prácticamente seguro que éste no concluirá para septiembre como dijo el año pasado el lehendakari, Juan José Ibarretxe.