Comercio rectifica y permitirá que algunas tiendas abran los festivos

Las tiendas que tienen menos de 120 metros cuadrados de superficie y que venden productos de alimentación, droguería y limpieza quedarán exentas de la prohibición de cerrar a las 22.00 horas y los días festivos. En contra de sus primeras intenciones, el Departamento de Comercio de la Generalitat ha aceptado excluir a estas tiendas de las restricciones que proyecta incluir en la nueva ley de horarios comerciales.

En la práctica, esta decisión supone mantener el estado actual de las pequeñas tiendas que abren los festivos, siempre que no pertenezcan a grupos. Pero con una diferenci...

Las tiendas que tienen menos de 120 metros cuadrados de superficie y que venden productos de alimentación, droguería y limpieza quedarán exentas de la prohibición de cerrar a las 22.00 horas y los días festivos. En contra de sus primeras intenciones, el Departamento de Comercio de la Generalitat ha aceptado excluir a estas tiendas de las restricciones que proyecta incluir en la nueva ley de horarios comerciales.

En la práctica, esta decisión supone mantener el estado actual de las pequeñas tiendas que abren los festivos, siempre que no pertenezcan a grupos. Pero con una diferencia: ahora la norma estatal da libertad total de horarios a las de menos de 300 metros cuadrados, si no forman parte de cadenas.

El Departamento de Comercio, que dirige Pere Esteve, ha atendido las peticiones de las cámaras de comercio y de la Federación de Municipios de Cataluña, que reclamaban más flexibilidad de horarios.

El Gobierno catalán mantiene, en cambio, su propósito de que los comercios sólo puedan abrir 8 festivos al año (frente a 12 en la actualidad) y de reducir de 90 a 72 las horas de apertura semanal. Se mantiene la obligatoriedad de que las tiendas no puedan abrir antes de las siete de la mañana ni cerrar más tarde de las diez de la noche, con la citada excepción para los comercios de menos de 120 metros, de las tiendas de conveniencia y de otras situadas en zonas turísticas.

Algunas organizaciones de consumidores critican las prisas del Gobierno por enviar el texto al Parlament y piden más tiempo para estudiar las necesidades del consumidor. "Se necesita tiempo para que sindicatos, consumidores y comerciantes nos pongamos de acuerdo", dijo el secretario general de la UCC, José Miquel Sanz. En similares términos se expresó otra entidad de consumidores, la CUS. "Hay que defender al pequeño comercio, pero olvidan al consumidor. Puede haber problemas en zonas de segundas residencias que reciben gente los fines de semana", dijo Carme Sabater.