La asistencia a bares, teatros y cines desciende a la mitad tras el 11-M

Los locales de copas tardarán más de dos meses en recuperarse, según miembros del sector

La noche madrileña está apagada. Los atentados del 11-M han dejado a los madrileños sin ganas de salir a bares, cines o teatros. La asistencia a los locales de copas ha bajado a la mitad, según José Luis Salazar, portavoz de la Asociación de Bares de Copas de Madrid. Los restaurantes y cines no han corrido mejor suerte. El número de clientes ha descendido al 40% desde que ocurrieron los atentados, según explican desde las asociaciones del sector. "La situación es totalmente nueva para nosotros. No sabemos cómo puede evolucionar", señalan los afectados.

El fin de semana pasado, la calle ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La noche madrileña está apagada. Los atentados del 11-M han dejado a los madrileños sin ganas de salir a bares, cines o teatros. La asistencia a los locales de copas ha bajado a la mitad, según José Luis Salazar, portavoz de la Asociación de Bares de Copas de Madrid. Los restaurantes y cines no han corrido mejor suerte. El número de clientes ha descendido al 40% desde que ocurrieron los atentados, según explican desde las asociaciones del sector. "La situación es totalmente nueva para nosotros. No sabemos cómo puede evolucionar", señalan los afectados.

El fin de semana pasado, la calle de Huertas y los alrededores ofrecían un aspecto inusual. Los bares apenas tenían clientes, nadie cantaba por las calles, no había colas para entrar en los locales y tampoco había problema para encontrar un taxi a partir de las tres de la madrugada. Alonso Martínez o la avenida de Brasil, otras dos zonas donde se concentran varios bares, presentaban el mismo aspecto. Los brutales atentados del 11-M han dejado a los madrileños sin ganas de diversión. Ferias como Expo Ocio presentan estos días un aspecto fantasmal. Los bares, restaurantes, teatros y cines tampoco están teniendo una gran asistencia de público.

"Desde el pasado jueves estamos teniendo la mitad de clientes que de costumbre. Hay una sensación de que, en estos momentos, salir a divertirse es algo obsceno", explica José Luis Salazar, portavoz de la Asociación de Bares de Copas de Madrid. Locales emblemáticos como Moby Dick, en la avenida de Brasil, cerraron el jueves en señal de luto. "Esta situación no la hemos vivido nunca. No sabemos cómo puede reaccionar la gente. Lo cierto es que el público está con pocas ganas de celebraciones", explica Andrés Burgaz, portavoz de la sala.

Duelo

A los empresarios teatrales tampoco les está yendo mejor estos días. El jueves y el viernes las salas cerraron en señal de luto. Algunos estrenos tuvieron que aplazarse, como el de la obra Diatriba de amor contra un hombre sentado, protagonizada por Ana Belén sobre un texto de Gabriel García Márquez. La obra finalmente se estrenó el pasado martes en el teatro La Latina. Otros espectáculos que ya están en marcha, como Cinco gays.com, han tenido un fin de semana "bastante flojo", según una portavoz de la obra. "Esta semana parece que ya se va recuperando", añadió dicha portavoz.

Durante el fin de semana, la asistencia de público a los teatros descendió hasta el 40%, según Jesús Cimarro, empresario teatral y secretario general de la Asociación de Productores de Teatro. "Todavía es un poco prematuro para decir cómo pueden evolucionar las cosas. El atentado sumado a las elecciones y al vuelco electoral con la victoria socialista han dejado a la gente bastante aturdida", apuntó Cimarro, que es empresario de los teatros Arlequín y Marquina.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Mariano Góngora, vicepresidente de la Sociedad de Empresarios de Cines de España, no es más optimista. Describe la situación como "desastrosa". "Ha sido tremendo. La gente está apesadumbrada. No salen a la calle salvo lo imprescindible. Todo el mundo prefiere estar en casa en familia, pendiente de las últimas noticias. Espero que todo vuelva a la normalidad en un par de semanas", señaló Góngora. "Esta situación nos tiene desconcertados porque no la hemos vivido nunca", añadió.

El mes de marzo es el más fuerte para las salas de cine de la región gracias a la celebración de los Premios Oscar. Pero este año no ha sido así. Un cine como el Paz, en la zona de Bilbao, recibió el año pasado más de 20.000 espectadores en este mes. Esta cifra difícilmente se va a repetir este año. Desde el día de los atentados, la afluencia a las salas ha descendido un 40%, según datos de Góngora.

Archivado En