Las escuelas de idiomas se suman a las críticas al decreto que diferencia el valenciano del catalán

La Escuela Oficial de Idiomas de Valencia se ha sumado a la campaña de oposición iniciada en diciembre por todos los sindicatos y partidos de izquierda de la Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares -nada más confirmarse la intención del Ministerio de Educación de aprobar un real decreto que pretende dar reconocimiento oficial al valenciano-, lo que otorgaría el rango de título propio diferenciado del de catalán, homologándolo al resto de lenguas cooficiales en el Estado, junto al español, el euskera, el gallego y el propio catalán.

Además de oficializar el título, "el decreto establec...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Escuela Oficial de Idiomas de Valencia se ha sumado a la campaña de oposición iniciada en diciembre por todos los sindicatos y partidos de izquierda de la Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares -nada más confirmarse la intención del Ministerio de Educación de aprobar un real decreto que pretende dar reconocimiento oficial al valenciano-, lo que otorgaría el rango de título propio diferenciado del de catalán, homologándolo al resto de lenguas cooficiales en el Estado, junto al español, el euskera, el gallego y el propio catalán.

Además de oficializar el título, "el decreto establece también el desarrollo del currículo para que el valenciano pueda ser estudiado en todas las escuelas oficiales del territorio nacional", según explicó a este periódico el ex senador del PP y actual responsable autonómico de Educación, Esteban González.

Los alumnos valencianos han remitido a la ministra de Educación, Pilar del Castillo, y al consejero González Pons los 73 folios, que contienen las 1.375 firmas recogidas entre el 26 de enero y ayer, de entre los alumnos y profesores de valenciano de las tres sedes que tiene la Escuela Oficial en Valencia, Alicante y Castellón. Los promotores de la campaña consideran que "la inminente ejecución del real decreto supone un despropósito" que, además, "no responde a criterios filológicos ni científicos". Paralelamente, en coordinación con los estudiantes de la Facultad de Filología de la Universitat de València, han iniciado una campaña de denuncia con el envío masivo de cartas a la ministra, el Defensor del Pueblo y su homólogo valenciano, el Síndic de Greuges.

Vuelta a la crisis de 1979

En ésta también se adjunta una misiva que el lingüista menorquín Francesc de Borja Moll envió en 1979 al entonces presidente del Gobierno Adolfo Suárez, en el momento en que se preparaba la publicación de una orden ministerial que pretendía oficializar la disciplina de Lengua Valenciana -recuerdan los estudiantes- que finalmente se retiró ante "las explicaciones tan convincentes del lingüista, que afirman que es una aberración científica aplicar a la palabra 'lengua' el adjetivo 'valenciana', como lo sería pretender que en Logroño se enseñase la 'lengua riojana".

"La situación actual", subrayan, "es exactamente igual a la de 1979", por lo que el contenido de la carta de Borja Moll "tiene plena vigencia" y animan al Gobierno a "aceptar el criterio científico vigente entre el profesorado de lingüística de las universidades de todo el mundo".

Archivado En