Un 32% de la población urbana mundial vive en barrios chabolistas
Unos mil millones de personas (el 31,6% de la población urbana mundial) viven en barrios chabolistas, y en 2033 podrían ser el doble, según un informe de la agencia de Naciones Unidas UN-Hábitat, El reto de los suburbios, hecho público ayer. En 2050, el fenómeno afectará a 3.500 millones de ciudadanos. "Debiéramos avergonzarnos de crear esas barriadas no planificadas", dice la directora de UN-Hábitat, Anna Tibaijuka.
Un 6,2% de los europeos vive en esos barrios. Pero se trata de un continente privilegiado. En África subsahariana, el porcentaje alcanza el 71,9%; en Asia central y ...
Unos mil millones de personas (el 31,6% de la población urbana mundial) viven en barrios chabolistas, y en 2033 podrían ser el doble, según un informe de la agencia de Naciones Unidas UN-Hábitat, El reto de los suburbios, hecho público ayer. En 2050, el fenómeno afectará a 3.500 millones de ciudadanos. "Debiéramos avergonzarnos de crear esas barriadas no planificadas", dice la directora de UN-Hábitat, Anna Tibaijuka.
Un 6,2% de los europeos vive en esos barrios. Pero se trata de un continente privilegiado. En África subsahariana, el porcentaje alcanza el 71,9%; en Asia central y meridional es el 58%; Latinoamérica llega al 31,9%; en Asia oriental y occidental es un 33,1%; en el sureste asiático, un 28%, y en Oceanía, un 24,1%.
El fenómeno ha crecido en los años noventa con la incesante urbanización de los países en vías de desarrollo, y se ha agravado por "políticas negativas como la expulsión forzosa de la población, la desidia permisiva y el reasentamiento obligatorio".
Los responsables de UN-Hábitat no tiran la toalla. "La primera solución", indica Tibaijuka, "es reiterar la necesidad de que haya voluntad política de resolver el problema". La directora recuerda que "una de las metas de la Cumbre del Milenio de la ONU es una mejora significativa para 2020 de la vida de al menos 100 millones de habitantes de barrios chabolistas. Tenemos que reconocer que los pobres son gente activa, decente y que trabaja duro. Pero, con políticas que les desmoralizan, ¿cómo vamos a esperar esa mejora?".