Unos objetivos de crecimiento e inflación que no se lograrán en 2003
El cuadro macroeconómico que acompaña a los Presupuestos de 2004, sería comparable a un mal alumno que no aprueba los examenes y tiene que repetir curso. Es lo que ha sucedido con los objetivos de crecimiento económico (3%) y de inflación (2%) que, salvo un milagro, no se cumplirán en 2003. Para este año, el Gobierno ha reconocido que el crecimiento será del 2,3%, mientras la inflación se encuentra en el mes de agosto en el 3%.
Para 2004, el Gobierno cuenta con que el entorno exterior será más favorable. Sin embargo, las recientes previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) no s...
El cuadro macroeconómico que acompaña a los Presupuestos de 2004, sería comparable a un mal alumno que no aprueba los examenes y tiene que repetir curso. Es lo que ha sucedido con los objetivos de crecimiento económico (3%) y de inflación (2%) que, salvo un milagro, no se cumplirán en 2003. Para este año, el Gobierno ha reconocido que el crecimiento será del 2,3%, mientras la inflación se encuentra en el mes de agosto en el 3%.
Para 2004, el Gobierno cuenta con que el entorno exterior será más favorable. Sin embargo, las recientes previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) no son muy optimistas en cuanto a la capacidad de la zona euro para tirar de la economía mundial. Esta zona absorbe algo más de la mitad del comercio exterior español y algunas de sus principales economías -entre ellas, Alemania- se encuentran en recesión. Pese a ello, el Gobierno español espera que el sector exterior tenga una aportación menos negativa al crecimiento económico (del 0,9% en 2003 al 0,4% en 2004).
El consumo de los hogares volverá a tirar del crecimiento económico (del 2,8% al 3,1%) según espera el Gobierno, gracias a la creación de empleo (300.000 nuevos puestos), a que el próximo será el segundo año de la rebaja del IRPF y a la congelación de los impuestos especiales.
La inversión privada también tendrá un alto ritmo de crecimiento (se mantendrá en el 3,9%), gracias a que se espera un buen ejercicio para los beneficios empresariales.