Londres extraditará al ex embajador de Irán en Argentina

El iraní está acusado por un ataque antijudío

La justicia británica dio inicio ayer a los trámites para la extradición a Argentina de Hadi Soleimanpour, ex embajador iraní en ese país, por su supuesta relación con un cruento atentado antijudío en Buenos Aires en 1994. El tribunal de Londres, ante el que compareció ayer el acusado, decidió que Soleimanpour permanezca detenido, con lo que ha comenzado el proceso para su posible extradición a Argentina.

El arresto preventivo en Londres de Soleimanpour, ex embajador en Buenos Aires entre 1991 y agosto de 1994, a pedido del juez que investiga el atentado contra la Asociación Mutual Isra...

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La justicia británica dio inicio ayer a los trámites para la extradición a Argentina de Hadi Soleimanpour, ex embajador iraní en ese país, por su supuesta relación con un cruento atentado antijudío en Buenos Aires en 1994. El tribunal de Londres, ante el que compareció ayer el acusado, decidió que Soleimanpour permanezca detenido, con lo que ha comenzado el proceso para su posible extradición a Argentina.

El arresto preventivo en Londres de Soleimanpour, ex embajador en Buenos Aires entre 1991 y agosto de 1994, a pedido del juez que investiga el atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en el que murieron 85 personas y otras 200 resultaron heridas, podría resultar clave para desvelar hasta dónde llega la complicidad del poder político en Argentina y en Irán con los responsables del ataque y el posterior encubrimiento.

Soleimanpour, de 47 años, es uno de los 13 ciudadanos iraníes reclamados por el juez. Según la abogada de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), "Soleimanpour facilitó la sede de la embajada para tramar el atentado". Casi dos años después de que el juez elevara el expediente a juicio oral, las audiencias sólo han servido para demostrar que durante las presidencias de Carlos Menem y Fernando de la Rúa las fuerzas de seguridad y el espionaje argentino trabajaron más para ocultar pruebas que para encontrarlas.

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