Una cooperante española de 22 años muere en Guinea Ecuatorial tiroteada por un militar

La joven iba en un autobús que fue atacado tras pasar por un control cerca de Mongomo

La cooperante española Ana Isabel Sánchez Torralba, de 22 años, murió la noche del martes en Guinea Ecuatorial por los disparos que un militar hizo contra el autobús que la llevaba a la ciudad de Mongomo, en la región continental de Río Muni, según informaron fuentes diplomáticas españolas. La joven tenía como destino final la localidad de Aconibe, donde iba a impartir durante el verano clases de alfabetización a mujeres y niñas. El incidente se originó, según las citadas fuentes, porque el autobús no se detuvo en un control del Ejército. Un militar les siguió y disparó contra el vehículo.
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La cooperante española Ana Isabel Sánchez Torralba, de 22 años, murió la noche del martes en Guinea Ecuatorial por los disparos que un militar hizo contra el autobús que la llevaba a la ciudad de Mongomo, en la región continental de Río Muni, según informaron fuentes diplomáticas españolas. La joven tenía como destino final la localidad de Aconibe, donde iba a impartir durante el verano clases de alfabetización a mujeres y niñas. El incidente se originó, según las citadas fuentes, porque el autobús no se detuvo en un control del Ejército. Un militar les siguió y disparó contra el vehículo.

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La primera experiencia de Ana Isabel Sánchez Torralba con las comunidades pobres de África terminó intempestivamente a un día de haberse iniciado. El microbús de la línea Iberia Bus, en el que viajaban dos de las tres chicas españolas que participaban en el programa de voluntariado, recibió los disparos de un militar molesto porque el chofer del vehículo no se detuvo ante el control del Ejército en el que se encontraba. La ráfaga hirió a tres personas pero sólo Ana Isabel perdió la vida. El proyectil le perforó un pulmón y el hígado.

Acompañada de otras dos jóvenes, Ana Isabel llegó el pasado lunes a Guinea Ecuatorial. Su objetivo era trabajar con las Misioneras Escolapias en la zona continental del país para impartir cursos de alfabetización a mujeres y niñas. Según relató María Ángeles Adame, responsable para la ciudad de Bata de las Misioneras Escolapias con las que iban a trabajar las chicas españolas, el microbús se topó con un control militar unos tres kilómetros antes de llegar a Mongomo.

El conductor del transporte aprovechó que los militares abrieron la barrera a un taxi que le precedía para pasar con su vehículo. Los oficiales del puesto le marcaron el alto al transporte colectivo. Los pasajeros descendieron del autobús y, tras un breve trámite, siguieron adelante.

El autobús continuó su camino, pero fue perseguido por uno de los militares abordo de un taxi. Unos metros antes de llegar a la estación de autobuses, el militar dio alcance al autocar y lo obligó a detenerse. Fue en ese momento cuando disparó contra la parte trasera del autobús. Ana Isabel, quien se encontraba en la última fila, recibió un balazo en el tórax. Inmediatamente fue llevada a un hospital en Mongomo, en donde la operó un grupo de médicos cubanos que se encuentra en el país para brindar labores de asistencia. Sin embargo dos horas y media después del incidente, Ana Isabel falleció.

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Tanto el agresor como el sargento del control y el chofer del bus han sido detenidos y están en la ciudad costera de Bata para ser interrogados, según fuentes del Gobierno ecuatoguineano. La misionera escolapia Adame apuntó que en sus 12 años en Guinea Ecuatorial no recordaba nada similar. "Llevo 12 años de misionera y nunca vi algo como esto, no es la tónica del país", aseguró.

Adame agregó que los responsables diplomáticos españoles en el país africano estuvieron desde el primer momento en contacto con las Misioneras Escolapias y con la familia de la víctima, facilitándoles los trámites para la repatriación del cadáver.

Dolores Rus, la monja de la Orden de las Escolapias que había organizado la misión humanitaria a Guinea Ecuatorial, lamentó la muerte de Ana Isabel y afirmó que en los 20 años que llevan organizando viajes hacia el país africano nunca había sucedido algo así. "Llevamos mucho tiempo participando en estas misiones; yo misma he estado allí un montón de años y nunca había pasado nada", dijo a Efe.

La muerte de Ana Isabel no es más que un hecho aislado, según el Gobierno ecuatoguineano; aun así el presidente del país, Teodoro Obiang, prometió actuar con todo el peso de la ley contra el culpable de lo que fue calificado con un "horroroso y lamentable error". Sin embargo, la Asociación para la Solidaridad Democrática en Guinea Ecuatorial afirma que no se puede calificar el hecho como un "infortunado accidente".

Esta organización guineana fue una de las primeras en dar la voz de alerta, ya que asegura que que hechos como el relatado son comunes en ese país, gobernado desde 1979 por Obiang. En uno de sus comunicados alerta de que el responsable militar de la zona en la que se produjeron los hechos es "un conocido torturador" llamado Francisco Mba Mendalma, quien fue condenado en 1999 a 30 años de prisión por un tribunal guineano, pero dos meses después de ser encarcelado fue indultado por Obiang.

Según líderes del partido opositor Convergencia por la Democracia Social (CDS), lo ocurrido con la joven española es un síntoma del clima "represivo" que se vive en Guinea Ecuatorial. "Un incidente como éste demuestra el nivel de represión que hay en un país que no está en guerra ni es limítrofe con países en guerra", señaló una fuente del CDS. Ésta agregó que lo ocurrido no será conocido por la mayoría de los guineanos.

El cuerpo de Ana Isabel fue transportado ayer por la mañana Malabo, capital de Guinea Ecuatorial, de donde estaba previsto que saliera a las 23.45 en un vuelo comercial hacia Madrid. A las 17.00 de hoy está previsto su entierro en Ocaña (Toledo), su pueblo natal, en el que se han decretado dos días de duelo.

Ana Isabel Sánchez Torralba, en la foto de la orla universitaria.EFE

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