Asesinado el cantante de los 'videoclips' pro Sadam
Un cantante iraquí, que gozó de popularidad y privilegios entre las autoridades del depuesto régimen de Sadam Husein y cuyos videoclips eran mostrados por la televisión oficial, ha sido hallado muerto en su domicilio de Bagdad, víctima de un disparo a quemarropa, según informó ayer uno de sus hermanos.
Los videoclips del cantante Dawood al Quaisi, afamado sobre todo por sus apasionados cantos patrióticos en los que alababa las hazañas bélicas, políticas y sociales del derrocado líder, parecen ser la causa directa de su muerte. La familia sospecha que ha sido asesinado, t...
Un cantante iraquí, que gozó de popularidad y privilegios entre las autoridades del depuesto régimen de Sadam Husein y cuyos videoclips eran mostrados por la televisión oficial, ha sido hallado muerto en su domicilio de Bagdad, víctima de un disparo a quemarropa, según informó ayer uno de sus hermanos.
Los videoclips del cantante Dawood al Quaisi, afamado sobre todo por sus apasionados cantos patrióticos en los que alababa las hazañas bélicas, políticas y sociales del derrocado líder, parecen ser la causa directa de su muerte. La familia sospecha que ha sido asesinado, tal y como está sucediendo en las últimas semanas con otros miembros de segunda línea del partido Baaz, único que manejó el poder durante la dictadura de Sadam, por su estrecha relación con el Gobierno anterior.
Según declaró Sabir Quaisi, hermano mayor del artista asesinado, "a las siete de la tarde del sábado, una camioneta aparcó enfrente de la vivienda bagdadí del cantante y cinco o seis personas se bajaron y empezaron a disparar". "Al oír el tiroteo, Dawood abrió la puerta de su vivienda para ver qué pasaba". Para Sabir, "todo fue un compló contra Dawood, porque en cuanto [éste] abrió la puerta, dos hombres se dirigieron hacia él, y uno de ellos le disparó a la cabeza, matándole en el acto." Sabir afirmó que "nadie había visto a los asesinos, que huyeron inmediatamente".
Sabir dijo que su hermano menor, de 55 años, reconoció que "tenía miedo por su seguridad personal" debido a que era miembro del Baaz. "Nosotros le advertimos de que lo prudente sería trasladarse a casa de unos parientes hasta la restauración de la ley y el orden. Dawood aceptó y se escondió durante 20 días, después de los cuales volvió, deprimido, a Bagdad", declaró.