El primer ministro marroquí recibe a Zaplana y anuncia su visita a España

El primer ministro marroquí, Driss Jettu, declaró ayer que había convenido con el ministro español de Trabajo, Eduardo Zaplana, abordar el "problema de la emigración" de "manera serena" con vistas a "poner fin" a la inmigración clandestina hacia Europa y fomentar la legal. "Marruecos está decidido a hacer un esfuerzo en colaboración con sus amigos europeos y en particular con España", añadió.

Jettu, quien recibió a Zaplana en Rabat a última hora de la tarde, aprovechó la ocasión para anunciar una próxima visita a España, "en cuanto el presidente del Gobierno y yo mismo nos pongamos de a...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El primer ministro marroquí, Driss Jettu, declaró ayer que había convenido con el ministro español de Trabajo, Eduardo Zaplana, abordar el "problema de la emigración" de "manera serena" con vistas a "poner fin" a la inmigración clandestina hacia Europa y fomentar la legal. "Marruecos está decidido a hacer un esfuerzo en colaboración con sus amigos europeos y en particular con España", añadió.

Jettu, quien recibió a Zaplana en Rabat a última hora de la tarde, aprovechó la ocasión para anunciar una próxima visita a España, "en cuanto el presidente del Gobierno y yo mismo nos pongamos de acuerdo sobre una fecha que nos pueda convenir".

El primer ministro no pudo evitar mencionar la posguerra en Irak: "Existe una perfecta identidad de puntos de vista [entre Rabat y Madrid] a la hora de considerar que se debe abordar el problema palestino-israelí de forma urgente". Zaplana insistió en la necesidad de buscar "una solución definitiva al problema palestino".

El principal motivo de la visita de Zaplana a Rabat fue la firma de una declaración de intenciones con su homólogo marroquí, Mustafá Mansuri, sobre cooperación y asistencia técnica en materia laboral y de asuntos sociales.

Zaplana ha sido el primer ministro español que se ha desplazado a Rabat desde que el 30 de enero la titular de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, viajó a la capital marroquí para poner término a la larga crisis diplomática bilateral.

La cordialidad con la que ha sido tratado contrasta con las embestidas de la prensa oficialista marroquí contra el presidente José María Aznar, al que acusa de haberse alineado con EE UU para garantizarse el apoyo de Washington ante las reivindicaciones de Marruecos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En