Cinco personas, afectadas por un brote de legionelosis en Badalona
La Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de Badalona alertaron ayer de la detección de un brote de legionelosis en esta población barcelonesa que, de momento, ha afectado a cinco personas, tres de las cuales permanecen hospitalizadas.
El primer caso diagnosticado corresponde a una mujer de 69 años que manifestó los síntomas de la enfermedad el 23 de febrero y fue ingresada en el Hospital Municipal de Badalona el 3 de marzo, donde permanece con una evolución positiva. El segundo afectado fue un anciano de 81 años que empezó a sentirse mal el 24 de febrero y que está hospitalizado des...
La Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de Badalona alertaron ayer de la detección de un brote de legionelosis en esta población barcelonesa que, de momento, ha afectado a cinco personas, tres de las cuales permanecen hospitalizadas.
El primer caso diagnosticado corresponde a una mujer de 69 años que manifestó los síntomas de la enfermedad el 23 de febrero y fue ingresada en el Hospital Municipal de Badalona el 3 de marzo, donde permanece con una evolución positiva. El segundo afectado fue un anciano de 81 años que empezó a sentirse mal el 24 de febrero y que está hospitalizado desde el 5 de marzo en el mismo centro sanitario y también con una evolución favorable. Otras dos personas, un hombre de 57 años que fue dado de alta el pasado día 10, y otro varón de 67 años dado de alta el día 8, fueron los siguientes casos diagnosticados, mientras que otro vecino, de 58 años, permanece aún ingresado en el Hospital Germans Trias i Pujol.
Un responsable del departamento de Sanidad explicó ayer que los cinco casos se han detectado en la zona norte de Badalona, "aunque por el momento no sabemos qué relación puede existir entre ellos". Desde la declaración del brote, las autoridades municipales han estado inspeccionando la mayor parte de torres de refrigeración censadas en la ciudad, un total de 24. Además están buscando torres de refrigeración no censadas para evitar que el brote se extienda como ocurrió en Mataró (Barcelona), donde dos personas murieron y otras 107 resultaron afectadas el verano pasado.