Más de la mitad de los alimentos básicos subieron por encima del IPC
Las sardinas, los tomates y las cebollas aumentaron más del 20%
La cesta de la compra se encareció notablemente el año pasado. La mitad de los productos básicos de alimentación subieron por encima de la inflación (el 3,9% en noviembre) en 2002. Son datos de la evolución de precios alimentarios que el Ministerio de Economía publica desde el pasado mes de noviembre. Las mayores subidas se registraron en los productos frescos, con la anchoa a la cabeza (un 35,24% más).
La alimentación se reveló el año pasado como uno de los sectores más inflacionistas. El índice de alimentos básicos frescos y envasados, que el Ministerio de Economía inició el mes pasad...
La cesta de la compra se encareció notablemente el año pasado. La mitad de los productos básicos de alimentación subieron por encima de la inflación (el 3,9% en noviembre) en 2002. Son datos de la evolución de precios alimentarios que el Ministerio de Economía publica desde el pasado mes de noviembre. Las mayores subidas se registraron en los productos frescos, con la anchoa a la cabeza (un 35,24% más).
La alimentación se reveló el año pasado como uno de los sectores más inflacionistas. El índice de alimentos básicos frescos y envasados, que el Ministerio de Economía inició el mes pasado, y que publicará mensualmente, corrobora los datos del índice de precios al consumo (IPC) en 2002 con respecto a este sector. De los 60 productos que el ministerio analiza, más de la mitad se encareció más que el IPC, que en noviembre se situó en el 3,9%, pero que llegó a alcanzar el 4% en octubre.
A lo largo de 2002, el IPC reflejó subidas de los alimentos por encima del 4,5%, es decir, más de la inflación, en los 22 primeros meses (aún falta el dato de diciembre, que se publicará el próximo día 14). En octubre alcanzaron su máximo nivel, con un incremento del 5,2%.
Alimentos frescos
Las mayores subidas se registraron en los alimentos frescos, uno de los grupos más volátiles del IPC. Más del 50% de los productos analizados experimentaron incrementos de precios superiores al 10%, según el estudio del Ministerio de Economía. El récord lo lograron las anchoas, que crecieron un 35,24%, seguidas de las peras de agua (31,35%), la bacaladilla (29,18%), las chirlas (25,12%) y los tomates para ensalada (24,78%).
Menores fueron las subidas en los alimentos envasados. Excepto el aceite de girasol refinado, que subió un 20,57%, y las salchichas de Francfort, que se encarecieron un 11,69%, las subidas no llegaron a los dos dígitos, aunque en muchos casos superaron la inflación. El aceite de oliva, por ejemplo, subió un 9,03%.
Pocas fueron las bajadas de precios registradas el año pasado, tanto en los alimentos frescos como en los envasados. La mayor se produjo en el cordero de primera, que costaba en diciembre un 15,2% menos que un año antes, aunque en diciembre se elevó un 3,44%. En el año, las patatas bajaron un 6,49%; las galletas, un 3,82%, y los pimientos verdes, un 2,84%.
En diciembre, la variación mensual de precios con respecto a noviembre fue casi insignificante en los alimentos envasados y muy acusada en algunos productos frescos. Las judías verdes encabezaron la lista de subidas en el último mes del año, con un 36,16%. También las bacaladillas (16,25%) y las anchoas (11,86%) registraron fuertes subidas en diciembre, al igual que lo hicieron en el resto del año. Las peras de agua, uno de los productos que más crecieron en el año, experimentó la mayor bajada mensual, con un 2,14%.
El análisis de precios publicado ayer es el segundo de la serie que en adelante se dará a conocer el primer martes de cada mes. Las principales subidas interanuales apuntadas en el último balance, relativo a diciembre, coinciden básicamente con las de noviembre. Entonces, el precio de las peras se elevó el 29,26%; el de los tomates, un 28,85%; el de las anchoas, el 25,5%. El aceite de oliva se encareció el 8,64%.
En la presentación del primer estudio de precios, el secretario de Estado de Comercio, Juan Costa, expresó su confianza en que las subidas comenzaran a moderarse, algo que, de momento, no se ha producido.