El porqué de la ayuda a Venezuela
El Gobierno brasileño ha decidido ayudar a Venezuela a combatir el desabastecimiento provocado por la huelga contra Hugo Chávez, ante el temor de que una crisis petrolera tenga efectos en Brasil, según un asesor del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
En unas declaraciones publicadas ayer por el diario O Globo, el asesor de Asuntos Internacionales de Lula, Marco Aurelio García, afirmó que Brasil está preocupado por la posibilidad de que la crisis venezolana y una ofensiva estadounidense contra Irak provoquen un aumento sin precedentes en los precios del petróleo. "Hay es...
El Gobierno brasileño ha decidido ayudar a Venezuela a combatir el desabastecimiento provocado por la huelga contra Hugo Chávez, ante el temor de que una crisis petrolera tenga efectos en Brasil, según un asesor del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
En unas declaraciones publicadas ayer por el diario O Globo, el asesor de Asuntos Internacionales de Lula, Marco Aurelio García, afirmó que Brasil está preocupado por la posibilidad de que la crisis venezolana y una ofensiva estadounidense contra Irak provoquen un aumento sin precedentes en los precios del petróleo. "Hay estudios que muestran que, en la hipótesis de un conflicto prolongado en Irak, la cotización del barril de petróleo podrá alcanzar los 50 o 60 dólares. Por eso, bajo el punto de vista económico, nuestra preocupación con Venezuela está al mismo nivel que un conflicto en Oriente Próximo", afirmó García.
Pese a producir casi el 80% del petróleo que consume, Brasil ligó los precios internos de los combustibles a la cotización internacional del crudo, por lo que ha tenido que subirlos varias veces en los últimos meses. Esos reajustes han hecho subir la inflación, que en 2002 llegó a su mayor nivel en los últimos ocho años y se ha convertido en uno de los mayores desafíos para Lula.
Según García, esa posibilidad fue la que justificó el envío, el mes pasado, de un barco con 520.000 barriles de combustible a Venezuela para combatir el desabastecimiento. Tal ayuda fue muy criticada por los opositores del presidente venezolano, que acusaron a Brasil de inmiscuirse en la política interna de su país. En cuanto a la situación política de Venezuela, García dijo que la posición de Brasil es muy clara: rechazo a un golpe de Estado y defensa de una solución negociada.