Karzai anuncia la creación de un Ejército nacional de Afganistán
El líder afgano pide ayuda en la conferencia de Bonn para desarmar a las milicias
El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, declaró ayer en la inauguración de la segunda conferencia de Bonn su intención de crear un Ejército nacional de 70.000 efectivos, así como de desarmar a las milicias controladas por los señores de la guerra. La reunión, de una jornada, contó con la participación de 34 países y su objetivo es recordar a la comunidad internacional sus compromisos con un país que sigue viviendo en la precariedad.
Los combates de este fin de semana entre dos señores de la guerra en la zona de Hérat, que causaron 11 muertos, son un nuevo recorda...
El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, declaró ayer en la inauguración de la segunda conferencia de Bonn su intención de crear un Ejército nacional de 70.000 efectivos, así como de desarmar a las milicias controladas por los señores de la guerra. La reunión, de una jornada, contó con la participación de 34 países y su objetivo es recordar a la comunidad internacional sus compromisos con un país que sigue viviendo en la precariedad.
Los combates de este fin de semana entre dos señores de la guerra en la zona de Hérat, que causaron 11 muertos, son un nuevo recordatorio de la debilidad del Estado afgano y de la fuerza de las milicias. Ha sido necesario un bombardeo de Estados Unidos para que las fuerzas del tayiko Ismael Jan y del pastún Amulá Jan decretasen ayer una tregua. Fuentes diplomáticas señalaron ayer en Bonn que el Ejército afgano dispone actualmente de unos 1.000 hombres, mientras que los diferentes líderes locales y gobernadores controlan unos 30.000 milicianos.
"El nuevo Ejército deberá dar a Afganistán unas fuerzas bien armadas y pagadas, ágiles y móviles, que no superarán los 70.000 efectivos", dijo Hamid Karzai en la apertura de la conferencia, que se celebró en la misma ciudad en la que fue designado, el año pasado, presidente del país por el conjunto de los representantes de las diferentes etnias afganas y de la comunidad internacional. "Aquellos que se encuentran fuera del Ministerio de Defensa, que consideran independientes, son considerados ilegales desde la firma de este decreto", agregó Karzai.
La creación de un Ejército afgano fue firmada el 5 de diciembre de 2001, en la primera conferencia de Bonn, aunque desde entonces ha sido objeto de negociaciones. Además de fijar el número de soldados, el decreto de ayer mantiene que las fuerzas armadas tendrán en cuenta la composición étnica del país.
Aunque contundente en su intención de desarmar a las milicias, que será casi imposible de llevar a cabo al menos a corto plazo, Karzai intentó mostrarse también conciliador al anunciar un amplio programa de reintegración en la vida civil de los muyahidín que, según dijo, "defendieron Afganistán durante los años de invasión y conflicto".
El canciller alemán, Gerhard Schröder, aseguró, por su parte, que la libertad que se conquistó con la caída de los talibanes debe ser "defendida cada día". "Sabemos que la liberación, el establecimiento de la seguridad y la reconstrucción de Afganistán es un proceso largo que requiere la paciencia de todos y un largo compromiso", agregó el canciller alemán.
Un coordinador para Afganistán de Estados Unidos, David Johnson, calculó que se necesitan cerca de 350 millones de dólares para entrenar, equipar y armar durante dos años a un Ejército afgano como el que fue decretado en Bonn. La financión del nuevo Ejército estará garantizada por la comunidad internacional, con Estados Unidos y Reino Unido a la cabeza.
47 millones de dólares
Sin embargo, en la reunión no se trató el tema de la ampliación de fondos para el país, aunque Washington recordó a los diferentes donantes que todavía tienen que desembolsar una parte importante, unos 47 millones de dólares, de los fondos que prometieron hace un año.
Tras cinco horas de reuniones de trabajo de las distintas delegaciones, Karzai señaló en rueda de prensa que el país que gobierna "no debe ser nunca más en el futuro una fuente de conflictos para sus vecinos, del mismo modo que éstos tampoco deben serlo para Afganistán". Por ello, el presidente afgano anunció la firma, el próximo día 22 de diciembre, de una declaración común de cooperación con sus vecinos -Irán, Pakistán, Tayikistán, Uzbekistán y China- para garantizar la estabilidad de la región.