Montilla afirma que el modelo policial se aplica de espaldas a los municipios

El primer secretario del PSC, José Montilla, censuró ayer el modelo policial catalán porque, dijo, presenta graves deficiencias. La más importante, en su opinión, es que está mal planificado, tiene lagunas importantes y se está aplicando "de espaldas a los municipios". En opinión de Montilla la situación se ha agravado por el progresivo repliegue del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil y la congelación de plantillas.

Las propuestas socialistas sobre seguridad serán presentadas el 5 de diciembre en Manresa por el presidente del PSC, Pasqual Maragall, pero la comisión sectorial ...

El primer secretario del PSC, José Montilla, censuró ayer el modelo policial catalán porque, dijo, presenta graves deficiencias. La más importante, en su opinión, es que está mal planificado, tiene lagunas importantes y se está aplicando "de espaldas a los municipios". En opinión de Montilla la situación se ha agravado por el progresivo repliegue del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil y la congelación de plantillas.

Las propuestas socialistas sobre seguridad serán presentadas el 5 de diciembre en Manresa por el presidente del PSC, Pasqual Maragall, pero la comisión sectorial de seguridad ciudadana del partido convocó ayer una conferencia para analizar el tema. Además de Montilla, intervinieron el dirigente del PSOE Juan Fernando López Aguilar, y el secretario de política local del PSC y alcalde de L'Hospitalet de Llobregat, Celestino Corbacho.

Montilla, que siempre se ha mostrado muy crítico por cómo se está realizando el despliegue de los Mossos d'Esquadra, responsabiliza de lo ocurrido a "la connivencia CiU-PP" y al Gobierno de la Generalitat, porque "se ha negado a asumir sus competencias en todo el territorio catalán". La consecuencia de esta desidia, dijo el primer secretario del PSC, ha generado un problema que afecta actualmente a más de la mitad de la población catalana, la que vive en la región metropolitana de Barcelona, el Camp de Tarragona, la comarca de la Anoia y las tierras del Ebro.

El ejemplo que ilustra las críticas de los alcaldes metropolitanos es que la policía autonómica se ha empezado a desplegar ya en algunos municipios pero tardará años en hacerlo en toda la conurbación de Barcelona.

Así, por ejemplo, el año que viene los Mossos d'Esquadra ya patrullarán por L'Hospitalet, pero no se sabe cuándo lo harán por las vecinas poblaciones de El Prat, Esplugues o Cornellà. El calendario pactado hasta ahora con el Ministerio del Interior abarca hasta 2005, por lo que, en el mejor de los casos, será a partir de entonces cuando lo hagan.

"Consejero de todos"

El esbozo de las propuestas que hizo ayer Montilla prevé que el Gobierno de la Generalitat tenga el mando y la responsabilidad única de todos los cuerpos policiales. "El consejero o consejera de Interior del Gobierno de Pasqual Maragall lo será de toda Cataluña y no de una parte de ella", dijo Montilla.

Por su parte, Corbacho explicó que, a su parecer, debe aplicarse un modelo mixto en las juntas locales de seguridad que permita a los alcaldes planificar las cuestiones de orden público en función de las necesidades de cada municipio. Para ello, reclamó el poder para que los alcaldes puedan mandar en el futuro sobre los agentes de los Mossos d'Esquadra de su ciudad, además de sobre la Policía Local.

Ese planteamiento, dijo Corbacho, implica una sola central de mando policial, una sola sala de coordinación, un solo teléfono "que después ya derivará las llamadas", y una sola oficina de denuncias. Para hacerlo posible, han de modificarse numerosas leyes.

Finalmente, López Aguilar, secretario de libertades públicas y desarrollo autonómico del PSOE, se centró en censurar con dureza al Gobierno del PP y ofreció una relación de cifras que, según él, ponen en evidencia que la seguridad ciudadana ha empeorado en España desde que dejaron de gobernar los socialistas. El dirigente del PSOE reivindicó la seguridad como "un valor de la izquierda" para proteger a los más desfavorecidos. En este sentido, afirmó que "la calle de Serrano de Madrid va bien, pero el resto de España, no".