Cataluña, la comunidad con más 'pymes', sólo recibe el 5% de las ayudas que les destina el Gobierno

La Generalitat acusa al Gobierno del PP de presentarse como el gran valedor de las pequeñas y medianas empresas (pymes) "sin predicar con hechos", según fuentes del Departamento de Industria. Cataluña, la comunidad que tiene mayor número de pymes, sólo recibe entre el 4% y el 6% del dinero que el Ejecutivo central distribuye a las diferentes comunidades españolas para que impulsen políticas de innovación, calidad o digitalización que permitan a las empresas ganar competitividad. El Gobierno sostiene que deben llevarse más fondos las regiones más pobres. Por ejemplo,...

La Generalitat acusa al Gobierno del PP de presentarse como el gran valedor de las pequeñas y medianas empresas (pymes) "sin predicar con hechos", según fuentes del Departamento de Industria. Cataluña, la comunidad que tiene mayor número de pymes, sólo recibe entre el 4% y el 6% del dinero que el Ejecutivo central distribuye a las diferentes comunidades españolas para que impulsen políticas de innovación, calidad o digitalización que permitan a las empresas ganar competitividad. El Gobierno sostiene que deben llevarse más fondos las regiones más pobres. Por ejemplo, Valencia.

Cataluña es la comunidad autónoma donde están activas más pymes. De acuerdo con los datos del Ministerio de Economía que constan en su último informe disponible, Las 'pyme' en España 1996-2000, el peso relativo de la comunidad catalana en el conjunto de España se situaba en diciembre de 2000 en el 18,66% del total.

Cataluña, junto con Castilla y León, fueron las dos comunidades que durante la segunda mitad de la década de 1990 perdieron más peso relativo: 0,24 puntos en el primer caso y 0,29 en el segundo. Madrid fue la que más peso ganó en el mismo periodo: 0,40 puntos.

Vista la importancia de las pymes, que representan el 99% de las empresas existentes en toda España y que aportan el 79,8% del empleo, el Gobierno de José María Aznar lanzó hace dos años largos el llamado Plan de Consolidación y Competitividad de la Pequeña y Mediana Empresa (Pyme). El ámbito de vigencia de este plan va del año 2000 a 2006. Su objetivo es estimular a estas firmas para que sean más competitivas, sobre todo en el campo de la innovación, la calidad, la productividad y la digitalización.

Paga Bruselas

La dotación presupuestaria para estas ayudas a empresas ha ido bajando con el tiempo. En 2001, ascendió a 85,16 millones de euros. En 2002, a 57 millones. Para 2003, se barajan 48 millones de euros.

Pero el Gobierno, obsesionado por el déficit cero, no se apunta el pago de la factura de este plan, sino que pasa el grueso de la factura a la Unión Europea, porque la competitividad de las pymes entra bajo el paraguas de financiación comunitaria.

Como se trata de fondos estructurales de Bruselas, Madrid "se ve obligada" a utilizar criterios de reparto para reequilibrar el territorio. Es decir, que las ayudas deben dirigirse sobre todo a las regiones menos desarrolladas. En este caso, la financiación de Bruselas representa el 80%, mientras que el Estado y las comunidades autónomas aportan a partes iguales el 20% restante.

En el caso de las comunidades fuera del objetivo 1, que son las que no superan el 75% de la riqueza media comunitaria, la contribución de los fondos estructurales de la UE se limitan al 70%. Del 30% restante, el 15% lo pone el Estado y el otro 15%, cada comunidad.

La cuestión es cómo se reparte este dinero. Cataluña, que supera en 10 puntos la media europea, percibió 4,58 millones de euros en 2001, 3,25 millones en 2002 y, con vistas a 2003, le esperan tan sólo 2,99 millones. Estas cantidades oscilan, según los años, entre el 4% y el 6%.

La Generalitat considera "escandalosamente injusto" este reparto y ha reclamado al Gobierno que no utilice "criterios de reequilibrio territorial" cuando se habla de innovación para distribuir la financiación disponible, que en 2001 ascendió a 85,16 millones de euros y en 2002, a 57 millones.

El Departamento de Industria está que trina. "Las empresas catalanas no compiten con las extremeñas, sino con las alemanas", señalan fuentes del departamento. "Comprendemos que se quiera favorecer las carreteras de las zonas más pobres, pero estamos hablando de políticas de innovación para pymes, y en las ayudas debería darse prioridad a las comunidades donde hay innovación y hay pymes", añaden las mismas fuentes.

Petición a Piqué

El anterior consejero de Industria, Antoni Subirà, ya había hecho llegar este mensaje al ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, aunque las pequeñas y medianas empresas dependen de Economía, porque la innovación pertenece a su negociado. Sin éxito. Fuentes del ministerio subrayan que los fondos son europeos y que "incluso sería hacer trampa" repartirlos de otro modo.

La Generalitat aduce que el Gobierno del PP "tiene un discurso favorable a las pymes", que se puso de manifiesto en la participación de Aznar en la Nit de l'Empresari organizada por la patronal Cecot la semana pasada, y que luego "no se corresponde con los hechos", sostienen fuentes de Industria, que añaden: "Dicen que Cataluña debe ser locomotora, pero no le dan carbón".

El reparto de los fondos basado en los niveles de riqueza plantea a Cataluña una paradoja: Valencia, gobernada por el PP y por la que el Gobierno peleó para que se mantuviera dentro del paquete de regiones de objetivo 1 en el actual plan plurianual presupuestario de Bruselas. Valencia, cuyas pymes suponen el 9,67% del conjunto de estas empresas españolas, es la comunidad que recibe más fondos. De media, tres veces más que Cataluña. En 2002, casi cuatro veces más (11,28 millones de euros frente a 3,2 millones). Para 2003, 10,29 millones, frente a los 2,99 millones que irán a Cataluña.