Los papeles de los Senespleda-Boatella

Los herederos de la familia Senespleda-Boatella, uno de los grandes nombres del Berguedà, se han reencontrado esta semana con sus papeles, los documentos que permiten reconstruir su historia desde el siglo pasado hasta el XIII. El fondo documental, cuya recuperación anunció el pasado lunes la Guardia Civil, constituye, según los técnicos, uno de los archivos familiares más interesantes de Cataluña. La importancia de la noticia radica también en el hecho de que la colección es escasamente conocida y menos estudiada porque hasta ahora había permanecido siempre bajo la tutela de la familia y se t...

Los herederos de la familia Senespleda-Boatella, uno de los grandes nombres del Berguedà, se han reencontrado esta semana con sus papeles, los documentos que permiten reconstruir su historia desde el siglo pasado hasta el XIII. El fondo documental, cuya recuperación anunció el pasado lunes la Guardia Civil, constituye, según los técnicos, uno de los archivos familiares más interesantes de Cataluña. La importancia de la noticia radica también en el hecho de que la colección es escasamente conocida y menos estudiada porque hasta ahora había permanecido siempre bajo la tutela de la familia y se tenía escaso conocimiento de su existencia, más allá de los ámbitos familiares. Ahora podrá saberse algo más de uno de los grandes apellidos del Berguedà, de una familia prototipo de la pequeña nobleza de la Cataluña interior.

Están el 'Llibre de don Eudalt de Boatella' y otros dietarios, cartas y testamentos

Los herederos de Senespleda-Boatella debieron de perder el archivo hace algo más de un año y medio. Jordi Claret, uno de los cuatro hermanos que han heredado el patrimonio de la familia, asegura que los documentos habían estado en su casa de la calle de la Ciutat, de Berga, hasta que se iniciaron, hace un par de años, unas importantes obras de rehabilitación. Claret, que reside en Barcelona, cree que en ese periodo se pudo producir la sustracción del material, que no echó en falta porque acudía con muy poca frecuencia a Berga.

De hecho, el archivo no había sido nunca tan consultado como desde que salió de la casa, porque el que se decía titular del mismo, Àngel Guixé, un tocinero de Berga que tiene un segundo negocio de venta de material antiguo, lo había enseñado a numerosos historiadores de la ciudad e incluso le había puesto precio, hasta el punto de que una universidad americana parecía interesada en adquirirlo.

Lo que no explicaba Guixé era cómo había llegado a sus manos ni por qué había separado del conjunto los últimos cuatro volúmenes, los más modernos y los únicos en los que aparecía el apellido actual (Claret) de los herederos Senespleda-Boatella. Ahora, tras la recuperación por fases (el pasado lunes la Guardia Civil anunció que había recuperado 21 de los 25 legajos y el martes el mismo inculpado presentó los otro cuatro ante la juez), la colección está prácticamente íntegra y sólo falta comprobar si los legajos están completos. La custodia provisional de la documentación está en manos del Departamento de Cultura de la Generalitat, pero Jordi Claret ya se ha entrevistado con los responsables del archivo de Berga para que este organismo se ocupe de su custodia y conservación.

Entre la documentación recuperada destaca el volumen Llibre de Don Eudalt de Boatella, en que estan tots els actes y papers que serveyxen per la senyoria del castell de Roset, compuesto en 1766, aunque contiene diversos documentos medievales. También hay documentos familiares, como testamentos, capítulos matrimoniales, correspondencia y diarios.