El 81% de los titulados prefiere trabajar cerca de casa en vez de promocionarse fuera

Los salarios profesionales en ciudades como Madrid o Barcelona simplemente triplican a los que pueda ganar un ingeniero o un informático en la Comunidad Valenciana. Ahí están las estadísticas. Sin embargo, la promoción salarial y laboral allende de las fronteras valencianas no parece lo suficientemente seductora como para sustituir la 'calidad de vida' ganada cuando se trabaja cerca de casa, según se desprende del primer estudio exhaustivo sobre la inserción laboral de los titulados por la Politécnica. 'La movilidad no está entre las preferencias de nuestros titulados', reflexiona el vicerrect...

Los salarios profesionales en ciudades como Madrid o Barcelona simplemente triplican a los que pueda ganar un ingeniero o un informático en la Comunidad Valenciana. Ahí están las estadísticas. Sin embargo, la promoción salarial y laboral allende de las fronteras valencianas no parece lo suficientemente seductora como para sustituir la 'calidad de vida' ganada cuando se trabaja cerca de casa, según se desprende del primer estudio exhaustivo sobre la inserción laboral de los titulados por la Politécnica. 'La movilidad no está entre las preferencias de nuestros titulados', reflexiona el vicerrector de Empleo, José Carlos Ayats, que adelanta que el equipo rectoral está estudiando medidas para favorecer la movilidad en los últimos años de curso, tanto a nivel nacional como europeo.

De hecho, según el estudio realizado con la perspectiva que da el análisis de los diferentes años de estancia laboral de los titulados desde el año 1995 hasta ahora, el resultado es que el 65,2% de los titulados de la UPV trabaja en empresas localizadas en la provincia de Valencia; el 11,3% en la de Alicante; el 5% en la de Madrid; el 1,8% en la de Barcelona y sólo un 10,7% se reparte entre el resto de comunidades autónomas y un débil 0,4% está instalado profesionalmente en Europa.

'Los datos', constata Ayats, 'tienen correspondencia con el origen y procedencia de los alumnos, con la excepción de Madrid, cuyo porcentaje por encima de capitales como Barcelona se explica por la mayor concentración de empresas del sector de las nuevas tecnologías que tienen su sede en la capital'. Por sectores económicos, la inserción laboral de estos profesionales cualificados tiene mucho que ver, señala, con 'la realidad de la estructura socioeconómica de la Comunidad Valenciana'. Así, el 27,1% de los titulados de la UPV trabaja en el sector servicios, seguido del 18,8% que trabaja en la construcción, del 16,5% que lo hace en industria y del 16,1% que trabaja en el sector de las telecomunicaciones.

Con todo, el grueso de los colocados, hasta un 43,3% lo hace en empresas de entre 10 y 50 trabajadores, las llamadas pymes, que nutren el 95% del tejido empresarial valenciano, por lo que este dato no deja de ser significativo. La llamada recurrente del presidente de la patronal CEV, Rafael Ferrando, a las pymes para que hagan una apuesta por la modernización y la tecnificación ante la competencia de los mercados globalizados parece haber hallado su correlato inmediato en la gestión de la Politécnica que, precisamente, en el último quinquenio se ha aplicado a fondo a consolidar canales de transferencia hacia las empresas, vía la firma de convenios de prácticas.

Este hecho parece haber servido para consolidar vínculos entre los titulados y las empresas de su área antes de finalizar la carrera, lo que favorece al término la inserción laboral. El estudio -realizado en colaboración con la consultora externa EMER-GFK entre mayo y junio de 2001- concluye que el 39,7% de los titulados de la UPV en estas cinco promociones había conseguido su primer empleo antes de finalizar la carrera. 'Este alto porcentaje de empleabilidad', destaca Ayats, 'se incrementa hasta el 84,7% de los titulados de la Politécnica, que consiguen su primer empleo antes de que pasen seis meses desde que terminaron los estudios'. Sólo el 2,8% manifiesta estar 'habitualmente' en paro. El 43,2% dice haber estado la mayor parte del tiempo empleado con contratos estables, el 26,5% con contratos temporales y el 10,8% continúa ampliando estudios, lo que se explica por el volumen de titulados de carreras de primer ciclo, que continuan su especialidad en segundo ciclo.

En todos los casos, un dato sobresale justo cuando el Gobierno ha dado un giro al sistema universitario con la LOU: el peso del expediente a la hora de encontrar un empleo (23%) empieza a competir de cerca con las prácticas durante los estudios (que se valoran un 18%), algo que, sin embargo, la LOU no aborda, pese a las exigencias de los rectores para homologar los créditos de prácticas al modelo europeo.