Interior no consigue la 'paz social' con los sindicatos pese a retirar los expedientes disciplinarios a 'berrocis'

El viceconsejero de Seguridad, Mikel Legarda, comunicó en la reunión que mantuvo el pasado miércoles con representantes de los sindicatos Erne, ELA y Comisiones Obreras que Interior ha retirado los expedientes abiertos en las últimos meses en la unidad de escoltas de Berrozi mientras estuvo dirigida por José Manuel Betanzos. Este encuentro, en el que participó el director de Recursos Humanos, Juan María Barasorda, es la primera reunión entre ambas partes tras un intercambio de misivas durante la pasada semana en el que las centrales amenazaban con movilizaciones y el consejero de Interior, Jav...

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El viceconsejero de Seguridad, Mikel Legarda, comunicó en la reunión que mantuvo el pasado miércoles con representantes de los sindicatos Erne, ELA y Comisiones Obreras que Interior ha retirado los expedientes abiertos en las últimos meses en la unidad de escoltas de Berrozi mientras estuvo dirigida por José Manuel Betanzos. Este encuentro, en el que participó el director de Recursos Humanos, Juan María Barasorda, es la primera reunión entre ambas partes tras un intercambio de misivas durante la pasada semana en el que las centrales amenazaban con movilizaciones y el consejero de Interior, Javier Balza, contestó que no tenía previsto 'plegarse' ante una 'amenaza expresa' de los sindicatos.

El conflicto vivido en los últimos meses entre los berrocis, por el que 100 agentes han pedido el traslado y se han abierto decenas de expedientes, quedó aparcado con la salida de Betanzos a finales de año y con el cierre de los expedientes, una de las exigencias de las centrales.

'Legarda nos comunicó que los expedientes han prescrito, pensando erróneamente que así iba a lograr la paz social', dijo ayer uno de los asistentes a la reunión.

El sindicato independiente Erne, mayoritario en el cuerpo, criticó a Interior por 'disfrazar su inoperancia en conflictos sindicales inexistentes' y acusó a Balza de estar instalado en la 'inoperancia y el victimismo de la Ertzaintza en vez de en la consecución de una policía eficaz'. Y se comprometió a utilizar todos los medios 'legítimos' para reconducir la 'imagen de policía política e ineficaz'.

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