El Gobierno propone a los ecuatorianos sin papeles que regresen a su país en busca de visado

'Pensamos que si retornan a su país para regularizar su situación, podemos comprometernos a garantizar su contratación aquí', dijo Fernández-Miranda tras reunirse en Murcia con empresarios, sindicalistas e inmigrantes. Éste, dijo, es 'el momento idóneo para solucionar la situación de ilegalidad y marginalidad' de miles de ecuatorianos que trabajan en situación irregular en los campos de Murcia. Se refería al convenio que firmarán España y Ecuador en breve y al contingente de contratos de trabajo para inmigrantes previsto para este año. La fórmula elegida por el Gobierno, que por encima de todo...

'Pensamos que si retornan a su país para regularizar su situación, podemos comprometernos a garantizar su contratación aquí', dijo Fernández-Miranda tras reunirse en Murcia con empresarios, sindicalistas e inmigrantes. Éste, dijo, es 'el momento idóneo para solucionar la situación de ilegalidad y marginalidad' de miles de ecuatorianos que trabajan en situación irregular en los campos de Murcia. Se refería al convenio que firmarán España y Ecuador en breve y al contingente de contratos de trabajo para inmigrantes previsto para este año. La fórmula elegida por el Gobierno, que por encima de todo se niega a abrir nuevos procesos de regularización de inmigrantes o plantear soluciones excepcionales locales como reclaman los empresarios, consiste en que los trabajadores extranjeros en situación irregular abandonen de forma voluntaria España para obtener un visado en su país de origen. En contrapartida, la Administración se compromete a darles prioridad en las contrataciones que reclamen los empresarios dentro del cupo de este año e, incluso, a sufragarles los viajes.

Y aunque la oferta se circunscribió ayer a la situación de Murcia, donde está patente el desajuste entre las necesidades de mano de obra y los inmigrantes regularizados disponibles, Fernández-Miranda indicó que su planteamiento es 'idéntico' para todos los inmigrantes irregulares. En concreto citó a los países con los que España negocia convenios, como Colombia, Marruecos o Rumania.

La propuesta del Gobierno va dirigida, al menos, a 150.000 ecuatorianos que residen de forma clandestina en España, según estimaciones de la asociación hispano-ecuatoriana Rumiñahui. Su representante, Dora Aguirre, anunció que consultará con los afectados para que sean ellos quienes decidan. No obstante, precisó que exigirá a la Administración que los contratos se formalicen antes de que partan para Ecuador.

La reacción de los empresarios murcianos fue más crítica. José Hernández, presidente de la Asociación de Productores-Exportadores de Frutas y Hortalizas, reprochó que el Gobierno pretenda devolver a los inmigrantes a Ecuador cuando ya hay 'ofertas concretas de empleo legal'. Su organización, con 40 empresas asociadas, y la Asociación Interprofesional del Limón presentaron a Fernández-Miranda 5.000 ofertas de empleo. Miranda agradeció la propuesta, pero insistió en su propuesta y descartó las soluciones 'transitorias' que pedían los empresarios, como la contratación provisional de quienes tienen pendiente el expediente de regularización (hay 8.000 casos en Murcia) o la concesión de permisos de residencia temporales por circunstancias humanitarias.