Cartas al director

El futuro de los jóvenes

A día de hoy, los jóvenes vascos tenemos muchos boletos para acabar engrosando las bolsas de exclusión social, para perder el empleo, temporal o indefinido, sufrir una grave enfermedad o incapacidad por causa directa del puesto de trabajo e incluso perder la vida. Y todo esto sin que a los co-responsables políticos se les mueva un pelo de sitio, dado que están más ocupados, al menos desde la Consejería de Trabajo, en tirar balones fuera, declarando públicamente que "si no podemos solucionar nuestros problemas es porque no tenemos las competencias necesarias". Y después se quedan tan tranquilos...

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A día de hoy, los jóvenes vascos tenemos muchos boletos para acabar engrosando las bolsas de exclusión social, para perder el empleo, temporal o indefinido, sufrir una grave enfermedad o incapacidad por causa directa del puesto de trabajo e incluso perder la vida. Y todo esto sin que a los co-responsables políticos se les mueva un pelo de sitio, dado que están más ocupados, al menos desde la Consejería de Trabajo, en tirar balones fuera, declarando públicamente que "si no podemos solucionar nuestros problemas es porque no tenemos las competencias necesarias". Y después se quedan tan tranquilos, sin buscar alternativas o explotar las competencias que tenemos desde hace años, o bien culpabilizar con campañas publicitarias estúpidas a los sindicatos, a los trabajadores, a jóvenes "alcoholizados" o a los propios excluídos sociales.En el organismo público Osalan confían en seguir ocultando los datos y estadísticas de siniestrabilidad laboral de jóvenes. Al menos mientras no pongamos nombres y apellidos a la incompetencia política y a su insana costumbre de dejar que todo suceda y no intervenir con decisión. Aunque tal vez consideren que encargar un bonito y voluminoso estudio a una consultora privada sea algo que vagamente se parezca a intervenir políticamente.

No existe nada similar a una predestinación en el hecho de que las personas sufran enfermedades graves, accidentes y demás siniestros por causa del trabajo, como tampoco hay nada de natural en que los responsables de Osalan escatimen los datos, que sí poseeen, a fin de evitar la conmoción pública que supondría conocer la auténtica situación de daños físicos de los jóvenes en el trabajo. "Euskadi ondo doa" y el futuro marketing del Plan Joven del Gobierno vasco lo venderá como una panacea, el parche perfecto para el roto y el descosido. El famoso plan que nada soluciona: falto de perspectiva, ambición y coordinación entre las administraciones vascas. Un Plan Joven inútil para una situación desesperada que les supera totalmente.- Xesús Xabier Fraga. Consejo de la Juventud de Euskadi. Bilbao.

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