El Tribunal Superior vasco reprocha a Ibarretxe que sus cargos fomenten la desobediencia civil

La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha censurado al Ejecutivo que preside Juan José Ibarretxe porque el director de Derechos Humanos del Departamento de Justicia (de Eusko Alkartasuna, EA) participara el 28 de octubre en una marcha en favor de la desobediencia civil y contra la operación para desbaratar la trama de desobediencia civil diseñada por ETA-Ekin. El tribunal lamenta que se fomente la desobediencia desde las instituciones y se indica que esos actos pueden servir de "estímulo y justificación" de los terroristas. En torno a esta polémica, el consejero d...

La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha censurado al Ejecutivo que preside Juan José Ibarretxe porque el director de Derechos Humanos del Departamento de Justicia (de Eusko Alkartasuna, EA) participara el 28 de octubre en una marcha en favor de la desobediencia civil y contra la operación para desbaratar la trama de desobediencia civil diseñada por ETA-Ekin. El tribunal lamenta que se fomente la desobediencia desde las instituciones y se indica que esos actos pueden servir de "estímulo y justificación" de los terroristas. En torno a esta polémica, el consejero de Justicia, Sabin Intxaurraga, recordó que un pacifista como Gandhi empleó la desobediencia para lograr una India independiente de Gran Bretaña.

Comparecencia

En la manifestación celebrada a finales de octubre en San Sebastián, marcha que contó con el apoyo de medio centenar de grupos sociales sindicales y políticos -entre ellos HB, EA y Elkarri-, se denunció la operación antiterrorista Itzali, dirigida por el magistrado Baltasar Garzón contra Ekin. En el transcurso de la marcha, algunos de los asistentes precintaron de manera simbólica el edificio de la Audiencia Provincia de Guipúzcoa.A la manifestación acudió el director de Derechos Humanos y Cooperación con la Justicia del Ejecutivo vasco, Juan José Martínez Leunda, quien llegó a asegurar que el deseo del consejero de Justicia, Sabin Intxaurraga, era haber acudido personalmente. El propio consejero defendió después en declaraciones públicas la presencia de EA y de miembros de su departamento en la citada convocatoria que tuvo como lema Por el camino de la desobediencia civil. Por los derechos democráticos de Euskal Herria. Intxaurraga terció en la polémica recordando la figura del pacifista Gandhi y la utilización que hizo de este instrumento no violento para lograr que la India dejara de ser una colonia del imperio británico.

El pasado viernes, en la habitual reunión de la Sala de Gobierno del alto tribunal vasco, se discutió una propuesta presentada por el decano de la Audiencia bilbaína, Juan Pablo González, en la que se censuraba abiertamente la participación de miembros del Ejecutivo que lidera Ibarretxe en la citada manifestación. En la resolución adoptada por el máximo órgano de gobierno de los jueces en Euskadi, presidido por Manuel María Zorrilla, no sólo se comunica al lehendakari y al consejero de Justicia su "desagrado ante la censurable intervención" de Martínez Leunda en la manifestación. Además, la Sala de Gobierno lamenta que "esa actitud fomente la desobediencia civil frente a las instituciones a las que representa y constituya, en detrimento del Poder Judicial, un acto de deslegitimación" de las mismas. Finalmente, se considera que este tipo de actos públicos de miembros del Ejecutivo vasco pueden "servir de estímulo y justificación a quienes realizan actos de violencia contra jueces, magistrados y otros servidores públicos".

ETA y HB defienden en documentos internos la vía de la desobediencia civil como uno de los instrumentos para avanzar hacia la independencia de Euskadi.

La respuesta no se hizo esperar y tanto el Departamento que encabeza Intxaurraga como el propio partido político que detenta la cartera de Justicia en el gabinete Ibarretxe salieron en defensa de Martínez Leunda. La consejería emitió una nota en la que se asegura que el director de Derechos Humanos representa "dignamente a las instituciones vascas y siempre ha estado presente en cuantos actos de repulsa y repudio de la violencia hayan tenido lugar". A juicio del Departamento que dirige Intxaurraga y en contra de lo que mantiene el alto tribunal vasco, "no tiene por qué identificarse desobediencia civil con ningún acto de deslegitimación institucional ni mucho menos con el estímulo o justificación de la violencia".

EA acusó a la sala de gobierno de "contribuir a enturbiar más el clima político y la convivencia democrática vasca" con esas críticas. La formación que preside Begoña Errazti advirtió, además, de que "el pretender confundir ideas democráticas con violencia es lo que realmente produce violencia". Tanto EA como el Departamento de Justicia subrayaron que "la desobediencia civil es, por definición, incompatible con la estrategia de la violencia de ETA y con cualquier vulneración de los derechos humanos" y recordaron que "constituye una forma legítima de lucha contra aquellas decisiones que contravengan los derechos democráticos de las personas y de los pueblos".

Se da la circunstancia de que Ibarretxe e Intxaurraga deberán comparecer hoy ante el pleno de la Cámara vasca, a petición de populares y socialistas, para explicar el apoyo de EA a esa manifestación. El PP preguntará hoy al lehendakari cómo es posible conjugar la desobediencia civil y la presencia de miembros del Gobierno en ests actos con la práctica institucional. El PP denuncia el "doble juego" de los nacionalistas y asegura que esas iniciativas son un "nuevo golpe" al Estatuto. El PSE cree que este tipo de actuaciones "puede traer gravísimas consecuencias para el sistema al poder inducir a quienes no tienen responsabilidad política a entender legítimamente abierta la veda y optar por otros tipos de desobediencias civiles".