PSC y CC OO tildan el plan de choque de "maquillaje"

El sindicato CC OO y el PSC coincidieron ayer en definir como una "mera operación de maquillaje" la inversión extraordinaria de 3.000 millones de pesetas que los consejeros de Sanidad, Eduard Rius, y de Economía, Artur Mas, anunciaron el lunes para acortar las listas de espera de los hospitales públicos y concertados de Cataluña.UGT también se sumó a las críticas y consideró que el plan de choque del Ejecutivo catalán "es absolutamente insuficiente y denota una clara improvisación en la planificación".

Los dos sindicatos y el grupo parlamentario PSC-Ciutadans pel Canvi reprocharon que 1...

El sindicato CC OO y el PSC coincidieron ayer en definir como una "mera operación de maquillaje" la inversión extraordinaria de 3.000 millones de pesetas que los consejeros de Sanidad, Eduard Rius, y de Economía, Artur Mas, anunciaron el lunes para acortar las listas de espera de los hospitales públicos y concertados de Cataluña.UGT también se sumó a las críticas y consideró que el plan de choque del Ejecutivo catalán "es absolutamente insuficiente y denota una clara improvisación en la planificación".

Los dos sindicatos y el grupo parlamentario PSC-Ciutadans pel Canvi reprocharon que 1.000 de los 3.000 millones previstos para poner en marcha el plan procedan de las propias partidas presupuestarias del Departamento de Sanidad. "Se va a desvestir a un santo para vestir a otro", dijo la diputada socialista Carme Figueras tras resaltar que "el presupuesto de Sanidad ya está suficientemente apretado". En el mismo sentido se expresó Luisa Montes, portavoz de CC OO para cuestiones sanitarias, quien lamentó que el departamento que dirige Rius tenga que paralizar otros programas ya presupuestados para atajar el problema de las listas de espera.

Sobre la procedencia de los 2.000 millones restantes para financiar el plan de choque, Figueras se mostró partidaria de que salgan de las partidas que el Departamento de Presidencia invierte en campañas de propaganda y publicidad. El consejero de Economía dijo el lunes que estos 2.000 millones deberían proceder de otros departamentos, sin concretar cuál de ellos. El Ejecutivo, advirtió Mas, deberá "sacrificar otros ámbitos de la acción de gobierno" para conseguir que ya este año los diferentes hospitales públicos y concertados funcionen al máximo de su capacidad y puedan realizar 15.000 operaciones adicionales, 500 de ellas de cirugía cardiaca. El objetivo de Sanidad es que en el año 2003 ningún ciudadano deba esperar más de seis meses para ser operado de cualquier patología y la demora media sea inferior a los tres meses.

Tanto el PSC como los sindicatos reiteraron ayer que Sanidad sigue sin dar a conocer los datos reales de las listas de espera en cada patología. El Ayuntamiento de Llagostera denunció ayer que el servicio de pediatría del dispensario de la localidad registra demoras de medio año para visitas porque sólo hay un pediatra para atender a los 775 niños censados en el municipio.

Menos críticos que los sindicatos y el PSC se mostraron ayer la Unión Catalana de Hospitales y el Colegio de Médicos de Cataluña. Coincidieron en aplaudir la "rápida" reacción de la Generalitat ante la polémica desatada sobre las listas de espera y el compromiso del Ejecutivo de aportar recursos adicionales para resolver el problema. Sin embargo, advirtieron que la Generalitat "deberá tener presente para los próximos años los recursos para financiar la actividad que los hospitales necesiten".

Al margen del plan de choque de la Generalitat, la comisión de cirujanos cardiacos nombrada por el Colegio de Médicos de Barcelona seguirá trabajando para evaluar económicamente el coste de poner al máximo rendimiento los distintos servicios de cirugía coronaria. La valoración se entregará a Sanidad en la próxima semana.