CONTESTADOR AUTOMÁTICO DE EL PAÍS-MADRID

Mensaje de un magrebí a los carteristas

» Parque en mal estado. "Les telefoneo muy preocupado por el estado, digamos geológico, del parque Enrique Tierno Galván", dice un paseante asiduo de este jardín situado entre la M-30 y la zona de Méndez Álvaro. "Es una verdadera pena cómo se encuentra aún el terreno sobre el que fue edificado, seguramente de echadizo, porque las grietas recorren por doquier su suelo. Quisiera", añade, "que alguien dispusiera hacer algo para sellar las grietas que aún no han sido tratadas, ya que es un parque muy bello que con atención y cuidado puede llegar a ser de los mejores de Madrid". ...

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» Parque en mal estado. "Les telefoneo muy preocupado por el estado, digamos geológico, del parque Enrique Tierno Galván", dice un paseante asiduo de este jardín situado entre la M-30 y la zona de Méndez Álvaro. "Es una verdadera pena cómo se encuentra aún el terreno sobre el que fue edificado, seguramente de echadizo, porque las grietas recorren por doquier su suelo. Quisiera", añade, "que alguien dispusiera hacer algo para sellar las grietas que aún no han sido tratadas, ya que es un parque muy bello que con atención y cuidado puede llegar a ser de los mejores de Madrid". » Usuarios. "Las obras del paseo de la Castellana ya han comenzado", dice un lector, "y todo parece indicar que se han adoptado las medidas pertinentes para no incordiar más, todavía, de la cuenta a los usuarios de automóviles y peatones. Yo me pregunto si los responsables de esta faraónica obra", agrega, "van a seguir durante los casi tres años que les esperan observando cierta atención hacia los madrileños o llegará el día en que, al igual que la desidia que caracteriza a muchas obras municipales o de la Comunidad, pondrán los intereses de los ciudadanos al servicio del descuido de los que dejan transcurrir meses sin cerrar una zanja o vallando una zona que únicamente sirve para incordiar al personal".

» "Cuando llueve, tiemblo" "Cuando reaparece la lluvia me echo a temblar", cuenta una señora de edad. "No sé cómo las autoridades mantienen la pintura resbaladiza de los pasos de cebra, es un verdadero atentado contra los peatones", dice muy enojada. "Me acabo de caer en el cruce de un semáforo y creo que me he roto una costilla, del dolor que tengo en el pecho. Es una vergüenza", dice indignada. "Menos mal que no venía ningún automóvil porque, si no, no lo cuento".

» Tiempo para enseñar. "Si los medios de comunicación, incluido el suyo, dedicaran la centésima parte del tiempo y el espacio que consagran al fútbol a divulgar conocimientos tan sencillos y, sobre todo, útiles, como la manera de freír un huevo, recoger un lavavajillas, fregar una pila o cambiar el pañal a un niño", dice una señora, "se ahorrarían todo el espacio periodístico que dedican a criticar el machismo y ensalzar de boquilla el feminismo, y podrían escribir de fútbol en ese mismo espacio. Muy pocos hombres tienen sentido práctico", añade.

» ¿Qué hay del jurado? "Me parece fatal que un derecho democrático como el de formar parte de un jurado", dice un lector, "se abra paso tan tardíamente en una sociedad democrática como la española, en general, y la de Madrid, en particular. Creo", agrega, "que ya va siendo hora de que desaparezcan los recelos a que la gente de la calle, la gente buena, cree los criterios de la justicia que han de aplicar los jueces. Los jueces no son los dueños de la justicia", explica, "meramente la administran. Si la justicia tiene algún dueño, o mejor dueña, ésa es la sociedad", precisa.

» La difícil enseñanza del arte."Los pintores, escultores, arquitectos, incluso los músicos de Madrid", dice un lector, "se quejan siempre de que en el mercado del arte sólo se vende basura. Quizá tienen razón", señala, "pero parecen olvidarse que desde el bachillerato, los madrileños no tienen ninguna otra referencia de lo que es el arte". Y añade: "Hoy por hoy, sólo la tercera edad visita los museos y puede cultivarse algo, ya que el resto de la población o bien está embrutecida de tanto trabajar, bien está desesperada buscando trabajo o bien languidece deprimida porque su esfuerzo es inútil".

» Coches y charcos. "Me parece una vergüenza que haya automovilistas que cuando circulan por el centro de Madrid los días de lluvia", se queja una señora de edad, "no tengan la delicadeza de transitar con suavidad para evitar mojar a los transeúntes. Pienso", agrega, "que es de una prepotencia inadmisible, porque los peatones nos encontramos indefensos ante ellos".

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» A los carteristas. "Éste es un mensaje para los carteristas norteafricanos que operan en la zona de Sol, Espoz y Mina y plaza de Santa Ana", telefonea un hombre que dice llamarse Hamid: "Dejad de desvalijar a la gente, porque los madrileños piensan que todos los del norte de África somos como vosotros y en vuestra actitud se fundamentan luego las actitudes racistas", explica. "Si realmente lo estáis pasando mal porque no encontráis curro", dice, "no os venguéis robando a los de aquí, porque luego sufrimos todos los inmigrantes las consecuencias de vuestra actitud egoísta. Buscaos la vida honradamente como hacemos los demás", subraya " y respetad a la gente de aquí, a la que le cuesta mucho esfuerzo ganarse la vida y le revienta sufrir vuestros robos constantes, que son odiosos para todos".

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