Más de 700 administrativos del SAS esperan desde 1991 que les asignen plaza
La política de personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) está empantanada. Nueve años después de que saliera una oferta pública de empleo (OPE) para administrativos, más de 700 plazas siguen pendientes de adjudicación y no hay visos de que el proceso vaya a terminar pronto. No es el único caso. En septiembre de 1998, más de 10.000 opositores realizaron las pruebas para 986 puestos de médico de atención primaria. Aún no han salido los listados definitivos. El SAS declinó explicar el motivo de la tardanza.
Los fallos en las convocatorias, la judicialización de los procesos de selección...
La política de personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) está empantanada. Nueve años después de que saliera una oferta pública de empleo (OPE) para administrativos, más de 700 plazas siguen pendientes de adjudicación y no hay visos de que el proceso vaya a terminar pronto. No es el único caso. En septiembre de 1998, más de 10.000 opositores realizaron las pruebas para 986 puestos de médico de atención primaria. Aún no han salido los listados definitivos. El SAS declinó explicar el motivo de la tardanza.
Los fallos en las convocatorias, la judicialización de los procesos de selección de personal y la lentitud de los tribunales han generado un laberinto judicial y administrativo. La situación más farragosa es la de la OPE para administrativos de 1991. En julio de aquel año, el SAS sacó a concurso 1.450 plazas para promoción interna. Los puestos fueron ocupados en febrero de 1992. Tres años más tarde, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía echó atrás la mitad de la convocatoria ya que según el fallo, debía dejarse el 50% de las plazas para oposición libre. De los 1.450, la mitad se quedó en la calle. El SAS sacó entonces las 725 plazas por el sistema libre. Hubo un segundo examen en octubre de 1998 y al año siguiente, en mayo, salió el listado definitivo de aprobados. Hace un par de semanas, cuando el proceso estaba a punto de concluir, el SAS revisó la valoración de los servicios prestados y anuló los méritos previos a la integración. Los sindicatos han advertido que la decisión volverá a judicializar el proceso, ya que a los primeros 725, los que llegaron por promoción interna, sí se le computó ese tiempo trabajado. CSIF arremetió contra "la ineptitud y la torpeza" del director general de personal del SAS, Tomás Aguirre, y pidió su cese. CCOO tildó la decisión de "arbitraria, innecesaria y absurda".
La Dirección General optó ayr por el silencio. Los médicos no llevan esperando tanto tiempo, pero tampoco saben cuándo se resolverá la adjudicación de plazas. Los listados provisionales de aprobados salieron en julio de 1999, casi un año después de las pruebas. Los resultados definitivos continúan en el aire.