DÍA MUNDIAL DEL SIDA

Datos prometedores del ensayo español de una vacuna del sida

Trece hospitales públicos españoles llevan dos años ensayando una vacuna terapéutica contra el sida en 300 seropositivos. El coordinador del experimento, Eduardo Fernández-Cruz, jefe de Inmunología del Gregorio Marañón, de Madrid, adelantó ayer que los resultados obtenidos hasta ahora son "prometedores" porque los pacientes tratados están generando inmunidad específica contra el virus del sida, si bien advirtió de que tales resultados no son definitivos.

La vacuna terapéutica que se está ensayando en España es la que diseñó Jonas Salk, el mismo que desarrolló la que evita la polio. La v...

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Trece hospitales públicos españoles llevan dos años ensayando una vacuna terapéutica contra el sida en 300 seropositivos. El coordinador del experimento, Eduardo Fernández-Cruz, jefe de Inmunología del Gregorio Marañón, de Madrid, adelantó ayer que los resultados obtenidos hasta ahora son "prometedores" porque los pacientes tratados están generando inmunidad específica contra el virus del sida, si bien advirtió de que tales resultados no son definitivos.

La vacuna terapéutica que se está ensayando en España es la que diseñó Jonas Salk, el mismo que desarrolló la que evita la polio. La vacuna terapéutica se dintingue de la preventiva en que no impide la infección en personas sanas, sino que genera autoprotección en las ya infectadas. El principio, sin embargo, es el mismo: intentar activar el sistema inmune inoculando un inmunógeno del VIH[Virus de Inmunodeficiencia Humana], es decir, un virus inactivado, sin capacidad infecciosa.

Al ensayo español le han precedido otros realizados en Estados Unidos, aunque los realizados allí fueron en plazos más cortos, mientras que aquí el estudio es de tres años, por lo que aún queda uno para terminar la experiencia. "Con todas las cautelas precisas, pues se trata de un ensayo clínico experimental, sí podemos decir que se está demostrando que es posible generar inmunidad específica contra el virus, desarrollar respuestas protectoras contra el VIH", dijo ayer Fernández-Cruz, que aprovechó la jornada científica organizada por el Colegio de Médicos de Madrid con motivo del Día Mundial del Sida. "En los pacientes españoles sometidos al ensayo se ha demostrado, incluso, que es posible inducir la generación de células asesinas contra el virus. También se ha detectado la potenciación de citocinas tipo TH-1 y las beta-quimiocinas, ambas también protectoras frente al virus".

La vacuna, cuyo ensayo aprobó la FDA estadounidense, la Agencia Europea del Medicamento y el Ministerio de Sanidad español, se está utilizando en 300 pacientes ya infectados por el virus del sida que no han desarrollado la enfermedad, por lo que su sistema inmune no está aún deteriorado. Además, la vacuna se está suministrando combinada con los potentes fármacos antirretrovirales que se prescriben a los enfermos de sida.

Durante las primeras seis semanas se trata a los pacientes con dichos fármacos. Después se divide aleatoriamente a los pacientes para suministrar a unos la vacuna y a otro un placebo. A los primeros se les administra la vacuna cada tres meses a lo largo de 36 meses. Patrocinan los ensayos empresas estadounidenses: Inmune Response Corporation (fundada por Salk), Agouron Farmaceuticals y Warner-Lambert.

Pruebas masivas

El comité científico de seguridad y eficacia, formado por europeos y estadounidenses, dio hace unas semana el visto bueno para que siga adelante el ensayo español. En un año estará terminado, de ahí que aún haya muchas incógnitas, como cuándo estará lista la vacuna para el público.

"Lo primero que tenemos que saber es si podremos utilizar un mecanismo alternativo", dijo Fernández-Cruz, "porque los antirretrovirales están demostrando una gran eficacia en el alargamiento de la vida de los enfermos, pero se detectan problemas, como la multiplicación del virus cuando se abandona el tratamiento por encima incluso de la etapa inicial".

Los hospitales que llevan dos años trabajando en este ensayo son los siguientes: Móstoles, Carlos III, La Paz, Ramón y Cajal, Doce de Octubre y Gregorio Marañón, de Madrid; Germans Trias i Pujol, Clínic, Bellvitge y Vall d´Hebron, del área de Barcelona; Virgen del Rosario, de Sevilla; Morales Messeguer, de Murcia, y Hospital General de Asturias.

Este ensayo español no es el único que se está realizando con personas ya infectadas por el virus. Los científicos eran contrarios hasta 1997 a probar vacunas preventivas (en personas sanas). A principios de 1998, el investigador estadounidense Anthony Fauci alertó contra tales ensayos por un problema de seguridad, aunque reconociera que las vacunas pudieran ser eficaces.

En enero de 1998, Estados Unidos autorizó, sin embargo, un ensayo masivo en humanos. Poco después, 300 voluntarios se inocularon el virus con fines científicos. Este año, la ONU anunció que probaría una vacuna contra el sida en 2.500 toxicómanos tailandeses.

"Es poco realista esperar una vacuna contra el sida antes de cinco años", dijo ayer en Nueva York el director ejecutivo de ONU-Sida Peter Piot. "La necesitamos para parar la epidemia, pero no podremos contar con ella porque no va a haber una eficaz antes de ese tiempo".

No hay pruebas de que una vacuna terapéutica como la ensayada en España pueda utilizarse en el futuro como una vacuna preventiva. "Quizá en el futuro se pueda demostrar que sí vale", dice Fernández-Cruz. "Pero lo importante para nosotros es demostrar ahora que podemos despertar en los infectados del sida respuestas inmunes que le defienden de la enfermedad".

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