Carranza cuenta ya con una balsa de agua que garantiza el suministro si hay sequía
El precio de la obra de abastecimiento tendrá un coste final de 270.000 pesetas por vecino
La Diputación de Vizcaya concluirá este mes la construcción de su balsa de almacenamiento de agua más grande, con la que se solventarán los problemas de sequía del valle de Carranza. Esta zona, donde habitan 3.200 habitantes, es la única de toda Euskadi con problemas periódicos de abastecimiento y este verano ha estado sin agua durante cuatro meses. Con la construcción de la balsa y las actuaciones llevadas a cabo desde 1995, garantizar el suministro de agua a Carranza habrá costado 270.000 pesetas por vecino.
La gran dispersión de Carranza -existen hasta 46 barrios incluidos en un tota...
La Diputación de Vizcaya concluirá este mes la construcción de su balsa de almacenamiento de agua más grande, con la que se solventarán los problemas de sequía del valle de Carranza. Esta zona, donde habitan 3.200 habitantes, es la única de toda Euskadi con problemas periódicos de abastecimiento y este verano ha estado sin agua durante cuatro meses. Con la construcción de la balsa y las actuaciones llevadas a cabo desde 1995, garantizar el suministro de agua a Carranza habrá costado 270.000 pesetas por vecino.
La gran dispersión de Carranza -existen hasta 46 barrios incluidos en un total de 26 núcleos de población dentro de una superficie de 138 kilómetros cuadrados- ha dificultado hasta ahora un servicio completo de agua. Los vecinos de esta comarca se suministran gracias a dos manantiales pero la llegada del verano les dejaba sistemáticamente sin existencias de agua.Ante ello, la Diputación inició hace un año la construcción de un embalse con una capacidad de 300.000 metros cúbicos en el alto de Cerroja, a 800 metros de altitud, cuya superficie -473 metros de largo y 126 de ancho- es equivalente a diez campos de fútbol. "Garantizará el abastecimiento de agua durante cuatro meses de demanda en el hipotético extremo de que todos los recursos existentes no suministraran ni una gota de agua", señala con convicción la diputada vizcaína de Medio Ambiente María, Esther Solabarrieta.
El sistema de abastecimiento es idéntico a las balsas de regulación de Álava para el plan de regadíos. "La ventaja con relación a una presa es que no tiene el problema de la crecida del río", indica Solabarrieta. La toma de agua se realiza desde una torre situada en el interior de la balsa, que tendrá un diseño singular al presentar la forma de un nenúfar en la parte superior.
Esta infraestructura tiene un coste de 320 millones de pesetas y se complementará con la construcción de una estación depuradora, que se ubicará al lado, y estará concluida antes del inicio del verano. "Para entonces se espera que todo el sistema de abastecimiento de La Cerroja se encuentre en funcionamiento".
Agua en diciembre
Solabarrieta apunta que desde diciembre ya se podría disponer del agua de la nueva balsa. "Lo que pasa es que en invierno, con las lluvias, no la van a necesitar".
Las actuaciones de la Diputación en el valle de Carranza se iniciaron en 1995 y la primera inversión importante fue la construcción de una estación de tratamiento de aguas potables. Con la balsa y la estación depuradora, el coste total alcanzará casi los 868 millones de pesetas, lo que significa que la garantía del suministro habrá costado 270.000 pesetas por vecino.
Carranza es ahora la única zona problemática en toda Euskadi en el abastecimiento de agua. Este año ha habido inconvenientes en la zona de Zarautz pero fueron circunstanciales y no periódicos, como año tras año se suceden en esta extensa comarca vizcaína.
El abastecimiento de agua en Vizcaya se sustenta en los embalses del Zadorra, con una capacidad de 190 millones de metros cúbicos, Ordunte (22 millones) y Undurraga (1,8 millones de metros cúbicos), todos ellos destinados al área metropolitana de Bilbao.
Junto a estos sistemas de aprovisionamiento, se encuentran los embalses de Artiba y Oiola (de 0,6 y 0.8 millones de metros cúbicos), que abastecen parcialmente a Barakaldo y Alosontegi; el de Nocedal (321.000 metros cúbicos), destinado a Sestao; Lekubaso (220.000) que suministra en parte a Galdakao, y el de Zollo (440.000 metros cúbicos), que completa el abastecimiento del Bajo Nervión.