ENFERMERÍA

Cuidar al cuidador

Cuando la enfermedad comienza, la familia debe realizar un proceso de aceptación y readaptación. La persona querida se irá deteriorando física, psíquica y socialmente. Cambiará de personalidad, dejará de ser aquella persona conocida. Sin memoria, perderá interés por lo que le rodea y tendrá comportamientos extraños, producidos por la enfermedad y por la inseguridad y el miedo que ésta le ocasiona. Esta situación puede desbordar al cuidador. Comprender la patología es el primer paso. El segundo, evitar sentimientos de culpa, de angustia. ¿Por qué a mí?, ¿por qué a mi padre?, pueden ser algunas ...

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Cuando la enfermedad comienza, la familia debe realizar un proceso de aceptación y readaptación. La persona querida se irá deteriorando física, psíquica y socialmente. Cambiará de personalidad, dejará de ser aquella persona conocida. Sin memoria, perderá interés por lo que le rodea y tendrá comportamientos extraños, producidos por la enfermedad y por la inseguridad y el miedo que ésta le ocasiona. Esta situación puede desbordar al cuidador. Comprender la patología es el primer paso. El segundo, evitar sentimientos de culpa, de angustia. ¿Por qué a mí?, ¿por qué a mi padre?, pueden ser algunas de las manifestaciones de angustia del cuidador, que, además, puede ser que se enfrente a la obligación de permanecer con el enfermo las 24 horas del día. Las coordinadoras del curso explican que en estos casos, a veces, es necesario distanciarse: "Dar un paseo, tomar un café. Para transmitir tranquilidad al enfermo el cuidador tiene que estar descansado, tiene que cuidarse y buscar tiempo para sí mismo sin sentirse culpable". Pero eso no es fácil. La primera dificultad es la falta de ayudas públicas para descargar al cuidador de la presión. Aunque sólo fuera un par de horas al día, para pasear o descansar, ayudaría mucho al cuidador a sobrellevar la carga.

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