Francia considera "tranquilizador" el informe sobre las 'vacas locas'

La secretaria de Estado francesa de Comercio, Marylise Lebranchu, calificó ayer de "tranquilizador" el dictámen científico comunitario relativo a la negativa de París a levantar el embargo al vacuno británico en relación con el llamado mal de las vacas locas. "Creía que desde el punto de vista científico avanzaríamos un poco más, pero con respecto al conjunto de los ciudadanos consumidores (...) esta opinión es más bien tranquilizadora", dijo.Lebranchu indicó que Jospin iba a analizar ayer con el ministro de Agricultura, Jean Glavany, en Guadalupe los detalles del veredicto comunitario y qu...

La secretaria de Estado francesa de Comercio, Marylise Lebranchu, calificó ayer de "tranquilizador" el dictámen científico comunitario relativo a la negativa de París a levantar el embargo al vacuno británico en relación con el llamado mal de las vacas locas. "Creía que desde el punto de vista científico avanzaríamos un poco más, pero con respecto al conjunto de los ciudadanos consumidores (...) esta opinión es más bien tranquilizadora", dijo.Lebranchu indicó que Jospin iba a analizar ayer con el ministro de Agricultura, Jean Glavany, en Guadalupe los detalles del veredicto comunitario y que el martes estaba prevista otra reunión con la secretaria de Estado para Sanidad, Dominique Gillot, "y nuestros propios expertos". "Lo importante", señaló, "es contar con el informe (comunitario) y compararlo con otros estudios científicos que tenemos en nuestras manos, así como confrontar los puntos de vista". El Reino Unido tenía previsto renovar su presión diplomática este fin de semana para acabar con el veto a la carne británica.

A comienzos de octubre Francia decidió mantener el embargo sobre la carne de vacuno, basándose en los argumentos de la Agencia Francesa de Seguridad Sanitaria de los Alimentos (AFSSA) sobre que el consumo seguía presentando riesgos. El Comité Científico de la UE examinó los datos aportados por la AFSSA y anunció el viernes que los nuevos elementos "indican claramente que no hay por qué revisar las opiniones científicas en la que se basó la decisión del Consejo de la UE", para levantar en agosto el embargo que ha durado tres años.