Una simulación de la proeza de Elcano estrenará el planetario donostiarra
El Museo de la Ciencia de San Sebastián, que está construyendo la Kutxa en el parque de Miramón, se inaugurará la próxima primavera con una simulación de la hazaña marinera de Juan Sebastián Elcano, el primero en circunnavegar el globo terráqueo, en 1522. Esta gesta universal, protagonizada por un guipuzcoano, servirá de estreno al planetario donostiarra y permitirá impartir lecciones básicas de astronomía y reproducir el firmamento tal cual lo vieron hace casi 500 años los tripulantes de la nao Victoria. La entidad de ahorro invertirá en la construcción del museo 2.100 millones de pesetas.El ...
El Museo de la Ciencia de San Sebastián, que está construyendo la Kutxa en el parque de Miramón, se inaugurará la próxima primavera con una simulación de la hazaña marinera de Juan Sebastián Elcano, el primero en circunnavegar el globo terráqueo, en 1522. Esta gesta universal, protagonizada por un guipuzcoano, servirá de estreno al planetario donostiarra y permitirá impartir lecciones básicas de astronomía y reproducir el firmamento tal cual lo vieron hace casi 500 años los tripulantes de la nao Victoria. La entidad de ahorro invertirá en la construcción del museo 2.100 millones de pesetas.El director del Museo de la Ciencia, Félix Ares de Blas, afirma que la vuelta al mundo de Juan Sebastián Elcano cumple todos los requisitos para ser el primer espectáculo que se proyecte en el planetario, en cuya pantalla gigante se reproducirán las constelaciones estelares que guiaron su singladura marina. Así, se mostrará que la estrella Polar desaparece al paso del ecuador, obligando a los marineros a tomar como referencia la Cruz del sur, que el cielo es diferente visto desde el norte o desde el sur y que la luna varía su forma según el hemisferio desde el que se mire.
El planetario, de 20 metros de diámetro y una cúpula de 14 metros de altura, contará con tres proyectores de vídeo, unos 40 de diapositivas y una pantalla semi-esférica. En este recinto recubierto exteriormente por una capa de aluminio se realizará una "labor divulgativa" sobre el universo, los planetas, las estrellas y la forma de orientarse contemplando el firmamento, en palabras de Ares de Blas.
Otro de los hitos del futuro Museo de la Ciencia donostiarra, de 8.000 metros cuadrados, será el observatorio astronómico, un telescopio situado dentro de una torre de 36 metros de altura desde el que podrán verse las manchas solares desde unos monitores de televisión de grandes dimensiones. El responsable de este recinto científico explica que en la parte superior del observatorio habrá instaladas unas cámaras de vídeo controladas a distancia que ofrecerán "vistas inéditas de San Sebastián", captadas por potentes lentes que mostrarán "con detalle" cualquier punto de la ciudad.
Taller de experimentos
Las instalaciones de este Kutxaespacio acogerán asimismo un hangar de la ciencia, concebido como un taller de experimentos, ideal para "dar rienda suelta a la investigación" y, por ejemplo, "construir la radio de galena que utilizaban nuestros abuelos". La sección dedicada al teatro de la ciencia, pensado para hacer demostraciones de química o electricidad, y un txiki-klik, donde los niños despertarán su curiosidad por lo desconocido, formarán parte también de las atracciones de este nuevo ámbito científico.
Una gran sala de 800 metros cuadrados albergará exposiciones temporales y por los pasillos y otras estancias se distribuirán numerosos módulos dedicados a explicar temáticas de muy diversa índole, como los fenómenos climáticos, la actividad volcánica, los misterios de la comunicación (morse, telefonía móvil, Internet), las propiedades y naturaleza de la luz y del color o el funcionamiento del cerebro humano, de la memoria.