Schröder intenta ganar a las juventudes del SPD para la causa de la Tercera Vía
La polémica sobre la modernización de la socialdemocracia europea ha prendido en las Juventudes del SPD (los Jusos), que tradicionalmente se han situado en el ala izquierda de la socialdemocracia alemana. El presidente de la organización federal de los Jusos, Benjamin Mikfeld, opuso ayer la "modernización de izquierdas" a los proyectos neoliberales del Nuevo Centro, expuestos en el documento que el primer ministro británico, Tony Blair, y el canciller federal alemán, Gerhard Schröder, difundieron en vísperas de las elecciones europeas. Schröder, que tras la dimisión de Oskar Laf...
La polémica sobre la modernización de la socialdemocracia europea ha prendido en las Juventudes del SPD (los Jusos), que tradicionalmente se han situado en el ala izquierda de la socialdemocracia alemana. El presidente de la organización federal de los Jusos, Benjamin Mikfeld, opuso ayer la "modernización de izquierdas" a los proyectos neoliberales del Nuevo Centro, expuestos en el documento que el primer ministro británico, Tony Blair, y el canciller federal alemán, Gerhard Schröder, difundieron en vísperas de las elecciones europeas. Schröder, que tras la dimisión de Oskar Lafontaine asumió la dirección del SPD, necesita ahora del apoyo del partido para llevar a cabo su proyecto reformista inspirado por Blair. Para ello ha de quebrar la resistencia de los Jusos, que se han enfrentado a él tanto a causa de la guerra en Yugoslavia como debido a la política contra el desempleo. La táctica del canciller consiste en fomentar las ilusiones y ambiciones profesionales de los jóvenes socialdemócratas más sensibles al liberalismo, en detrimento de los más apegados a las tradiciones socialdemócratas clásicas. Schröder ha dado un golpe de efecto al nombrar como ministro de la Cancillería a Hans Martin Bury, un diputado de 33 años, para sustituir al peso pesado Bodo Hombach, que coordinará el plan de estabilización en los Balcanes.
"El buen camino"
Por si queda alguna duda de cuál es el proyecto modernizador que impulsa, Schröder dijo ayer en Bonn que seguirá sin desviarse los pasos renovadores de Tony Blair, y añadió: "Ése es el buen camino". El canciller -que se despedía ayer antes de irse de vacaciones-, reanudará su trabajo el próximo 23 de agosto, instalado ya en unas dependencias provisionales en Berlín. Con su toma de posición ayer en Bonn, Mikfeld reaccionaba ante el manifiesto de un grupo de 13 jóvenes diputados socialdemócratas del Bundestag (el Parlamento federal), quienes el pasado fin de semana salieron en defensa del proyecto de modernización del canciller. El grupo en cuestión, que es conocido ya como The Youngsters (los jóvenes), está formado por algunos de los benjamines de la fracción socialdemócrata en el Parlamento, entre ellos Carsten Schneider, de 23 años. El grupo socialdemócrata del Bundestag, el mayor de la historia, consta de 298 diputados, de los cuales 36 son menores de 40 años.
En conversación telefónica con este periódico, Mikfeld opinó que la posición de The Youngsters no puede considerarse como una tendencia mayoritaria dentro de los Jusos. "En el partido hay tanto una vieja izquierda como una joven derecha", señaló. El dirigente Juso reconoció la existencia de un "conflicto" entre los Jusos y Schröder que en el pasado fue él mismo jefe de las juventudes socialdemócratas.