El ministro turco del Tesoro intenta el suicidio tras la filtración de un secreto

El ministro turco del Tesoro, Hikmet Ulugbay, de 60 años, intentó suicidarse en la madrugada del miércoles, disparándose con un revólver un tiro en la cabeza. La bala, que no llegó a dañarle el cerebro, le desgarró la garganta y la lengua, y salió por la nariz. El ministro fue intervenido en el hospital Baskent, de Ankara. El intento de suicidio, al parecer, guarda relación con la filtración de un documento confidencial que provocó el desplome de la Bolsa de Estambul a comienzos de la semana pasada.

A las 12.45 horas de la madrugada del miércoles se escuchó un disparo en el domicilio pa...

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El ministro turco del Tesoro, Hikmet Ulugbay, de 60 años, intentó suicidarse en la madrugada del miércoles, disparándose con un revólver un tiro en la cabeza. La bala, que no llegó a dañarle el cerebro, le desgarró la garganta y la lengua, y salió por la nariz. El ministro fue intervenido en el hospital Baskent, de Ankara. El intento de suicidio, al parecer, guarda relación con la filtración de un documento confidencial que provocó el desplome de la Bolsa de Estambul a comienzos de la semana pasada.

A las 12.45 horas de la madrugada del miércoles se escuchó un disparo en el domicilio particular del ministro del Tesoro, Hikmet Ulugbay. Su mujer y uno de sus hijos acudieron rápidamente al despacho, donde encontraron al ministro herido de bala en la cabeza, y le impidieron que se disparara un segundo tiro, que habría acabado con su vida. Ulugbay fue trasladado al hospital Baskent, de Ankara, donde fue intervenido quirúrgicamente durante tres horas. Según el parte médico, la vida del ministro no corre peligro. Ulugbay, que se ha granjeado una reputación de persona honesta y competente, es considerado el hombre de confianza del primer ministro, el socialdemócrata Bulent Ecevit, en cuyo Gobierno ocupaba la cartera de Economía.

Su fallida tentativa de suicidio se ha producido tras una ardua negociación con una delegación del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la concesión de un posible crédito extraordinario a Turquía. Aunque las causas del suceso siguen estando oscuras, todos los rumores apuntan a la posibilidad de que las reiteradas caídas de la Bolsa de Estambul sean el motivo de tan drástica decisión.

Así, los movimientos especulativos de las últimas semanas, que culminaron el viernes con una caída de más del 7%, se originaron a raíz de la filtración de un documento confidencial del Gobierno turco en el que se advertía sobre la necesidad de proceder a un ajuste serio de la deuda nacional como consecuencia de las conversaciones con el FMI.

Tipos de interés

Aparentemente, dicho documento pudo ser entregado por un alto funcionario del Tesoro a un destacado líder político. Este último, temeroso de que se aproximara un drástico recorte de los tipos de interés, trasladó esta información confidencial a inversores y agentes bursátiles amigos, quienes, a su vez, trataron de salvaguardar sus inversiones iniciando un movimiento especulativo de ventas en masa que terminó por arrastrar al conjunto del mercado de valores. La prensa turca responsabiliza de la filtración al subsecretario del Tesoro en funciones, Cüneyt Sel, quien dimitió inesperadamente el pasado miércoles. De acuerdo con esta versión de los hechos, Ulugbay no habría podido soportar ser el responsable último de la crisis financiera.

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Paradójicamente, las conclusiones del Fondo Monetario Internacional anunciadas el mismo viernes arrojan un balance positivo para Turquía y apoyan el programa antiinflacionista diseñado por el Gobierno de Ecevit, aunque todavía no se ha llegado a un acuerdo sobre el montante del crédito que este organismo multilateral concederá al país.

Tanto el primer ministro, Bulent Ecevit, como el presidente de la República, Suleyman Demirel, acudieron ayer al hospital de Baskent para informarse de cómo se encontraba el ministro tras la operación a la que fue sometido.

Ecevit calificó a Ulugbay como "una persona con un gran sentido de la responsabilidad" y aseguró que, tras las negociaciones mantenidas con el FMI, se encontraba en un estado de ánimo deprimido.

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