La huelga de médicos deja a medio gas los hospitales de Galicia y Cataluña

Los MIR y los especialistas sin título acercan posturas, pero no llegan a un acuerdo

Los facultativos de plantilla y los médicos internos residentes (MIR) dejaron ayer a medio gas la asistencia médica en los hospitales públicos de Cataluña y Galicia. La protesta, en toda España entre los residentes, está motivada por el decreto que elabora el Gobierno para dar la acreditación de unos 3.000 mestos, especialistas que no realizaron la formación obligatoria del sistema MIR. Sanidad delegó en la Organización Médica Colegial la resolución del conflicto. Este organismo reunió a MIR y mestos en Madrid, que acercaron posturas pero no lograron pactar el final del conflicto.

Galic...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los facultativos de plantilla y los médicos internos residentes (MIR) dejaron ayer a medio gas la asistencia médica en los hospitales públicos de Cataluña y Galicia. La protesta, en toda España entre los residentes, está motivada por el decreto que elabora el Gobierno para dar la acreditación de unos 3.000 mestos, especialistas que no realizaron la formación obligatoria del sistema MIR. Sanidad delegó en la Organización Médica Colegial la resolución del conflicto. Este organismo reunió a MIR y mestos en Madrid, que acercaron posturas pero no lograron pactar el final del conflicto.

Galicia y Cataluña protagonizaron la huelga hospitalaria de ayer. Donde más se notó fue en los grandes hospitales catalanes, en donde la protesta fue secundada por cerca de 2.000 médicos de plantilla (65%), cifra de la Consejería de Sanidad que algunos colectivos de profesionales elevaron a un 80%. Entre los MIR catalanes, el seguimiento ascendió en torno al 85%. Unos 500 residentes y médicos adjuntos se manifestaron por el centro de Barcelona. El consejero de Sanidad, Eduard Rius, que fue abroncado por una veintena de residentes cuando entraba en un acto universitario, manifestó que "transmitiré nuestra preoucupación por la huelga al ministro de Sanidad". En los hospitales catalanes se concentra el mayor número de mestos de España, en donde trabajan unos 800, según los sindicatos médicos. En Galicia, la Xunta cifró el seguimiento de los MIR en un 44% y en un 25% entre los médicos adjuntos, informa Primitivo Carbajo. Fuentes de los convocantes cifraban el seguimiento de la huelga en un 90% de los residentes y en un 55% entre los facultativos de plantilla. En todos los hospitales se realizaron concentraciones de protesta y, en Santiago, medio centenar de huelguistas cortó el tráfico rodado frente al hospital.

En ambas comunidades se tuvieron que reprogramar gran parte de las consultas externas y muchos quirófanos pararon. Los servicios mínimos garantizaron la asistencia de urgencia y las unidades más delicadas, como quimioterapia, radioterapia, partos y hemodiálisis, por lo que no hubieron incidentes. Los médicos de plantilla de los hospitales de León, Toledo y el Reina Sofía de Córdoba también secundaron la protesta con un seguimiento desigual. El centro Valdecilla de Santander y otros dos de Sevilla no pudieron sumarse a la protesta porque presentaron tarde el preaviso de huelga.

El Ministerio de Sanidad, que tiene congelado desde hace 12 días el nuevo proyecto de real decreto de acceso excepcioal título de especialistas, ha delegado en la mediación de la Organización Médica Colegial (OMC) la resolución del conflicto. La OMC reunió en su sede de Madrid durante más de 10 horas a la Coordinadora Estatal de Médicos Internos Residentes (CEMIR) y los representantes de los mestos en la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM). A la salida de la reunión, los portavoces de ambos colectivos se mostraron optimistas porque habían acercado las posturas, pero sin llegar a un acuerdo definitivo, el cual se podría producir en una nueva reunión que la OMC ha fijado para mañana.

Los mestos y la CEMIR, que deja pendiente su posición final a la opinión de las asambleas de los hospitales, están de acuerdo en que el aval de la formación de los mestos podrá ser expedido en centros acreditados oficialmente para la docencia o en aquellos que, sin serlo, estuvieran en condiciones similares. Asimismo, ambos colectivos están de acuerdo en que la experiencia que finalmente requiera Sanidad a los mestos para convalidar su formación deberá ser demostrada bajo contrato o nombramiento, dejando abierta la puerta a si esta experiencia clínica debe ser o no retribuida salarialmente. También se han acercado posturas en la necesidad de un examen tipo test, aunque los MIR quieren que sea previo a la evaluación del currículum mientras que los mestos creen que debe ser posterior.

La CEMIR y los mestos siguen sin llegar a un acuerdo en el año de licenciatura que ha de servir de corte para los facultativos que aspiren acogerse al decreto de convalidación de especialidades. Este punto será debatido en la reunión de mañana.

El problema que, bajo madato parlamentario, intenta solucionar Sanidad está a caballo entre la correcta verificación de la formación de unos profesionales que no han realizado la oposición legal para ser especialistas y la lucha por un mercado laboral cada vez más saturado. Un reciente estudio de la CESM apunta que el número de médicos en paro aumentará de forma preocupante en los próximos años, incluidos los propios MIR.

Archivado En