Once directivos de TCSA, acusados de "apropiación indebida" de 450 millones
Once directivos de TCSA, la empresa encargada del transporte en autobús en Bilbao y en las localidades más pobladas de Vizcaya, comparecerán la próxima semana ante un juzgado acusados de "apropiación indebida" de más de 450 millones de pesetas. Una querella revela que la empresa vendió a una inmobiliaria filial siete inmuebles por 216 millones y los recompró, tres años después, por 666. TCSA recibe una subvención anual de las instituciones que en 1998 superó los 106 millones.
La querella, presentada por un accionista minoritario, fue admitida el pasado abril por un juzgado bilbaíno. Rel...
Once directivos de TCSA, la empresa encargada del transporte en autobús en Bilbao y en las localidades más pobladas de Vizcaya, comparecerán la próxima semana ante un juzgado acusados de "apropiación indebida" de más de 450 millones de pesetas. Una querella revela que la empresa vendió a una inmobiliaria filial siete inmuebles por 216 millones y los recompró, tres años después, por 666. TCSA recibe una subvención anual de las instituciones que en 1998 superó los 106 millones.
La querella, presentada por un accionista minoritario, fue admitida el pasado abril por un juzgado bilbaíno. Relata que, en marzo de 1994, TCSA se desprendió de nueve inmuebles de su propiedad, que superaban los 15.000 metros cuadrados, para venderlos por 548 millones a su filial Inmuebles Madariaga, "de la que son propietarios quienes ejercen el control efectivo de TCSA, las familias Aguinaga Cárdenas y Llantada Aguinaga". Tres años después, relata la demanda, la empresa de autobuses compró a Inmuebles Madariaga siete de las nueve fincas -cuyo valor en 1994 había ascendido a 216 millones- por más de 666 millones. "Esta operación de ida y vuelta ha representado para TCSA una distracción de recursos por importe de 450 millones. Sigue teniendo las mismas siete fincas que tenía y de las que ninguna necesidad tenía de desprenderse", añade el texto. La querella incluye la preocupación mostrada en varios consejos de la empresa por varios accionistas. El presidente justificó la operación, dos años antes de la recompra, por "la política de separación de la actividad inmobiliaria de la propia del desarrollo del objeto social". El demandante sostiene que TCSA no "quería prescindir de los inmuebles. Se pretende que disponga de su tesorería pagando un precio anormalmente alto por siete de las fincas". Añade que el Consejo de Administración "ocultó" que las fincas no recuperadas fueron revendidas por Inmuebles Madariaga. La querella incluye la denuncia por la pérdida de la mayoría de la filial Inmuebles Madariaga, que del 99% inicial ha pasado a un 48%, lo que "implica la consumación de la pérdida patrimonial". "La gravedad de la situación sólo podría verse superada si, como nos tememos, Inmuebles Madariaga continúa bajo control directo o indirecto de las personas que ejercen el control efectivo de TCSA". Por ello, se acusa a 11 miembros del Consejo de Administración, incluidos el anterior y el actual presidente, de apropiación indebida y administración desleal. El juez ha citado para el lunes, martes y jueves próximos a la gran mayoría de ellos como imputados. TCSA se encarga del servicio urbano de autobuses en Bilbao desde 1948, aunque desde 1988 lo gestiona mediante un convenio con el Ayuntamiento. Es el operador más importante en Vizcaya, al explotar las líneas de las márgenes derecha e izquierda, la conexión de Bilbao con Galdakao y con el campus de la UPV. Debido al servicio público que presta, ha recibido de la Diputación y el Ayuntamiento una subvención de 117 millones en 1997 y de 106 millones en 1998.