Otros 10.000 a la espera
Al otro lado de las montañas del paso macedonio de Lojane, al norte del país, cerca de 10.000 albanokosovares expulsados de sus casas por las fuerzas serbias están esperando la mínima oportunidad para abandonar Kosovo y convertirse en otra fría cifra más de los deportados por el régimen de Belgrado. Tanto el alcalde del pueblo de Lojane como un responsable de ACNUR aseguraban ayer que hasta 10.000 personas podrían estar del "otro lado". A través de un albanokosovar que en los últimos días había cruzado por el mismo paso fronterizo obtuvieron el número de un teléfono móvil con el que contactar...
Al otro lado de las montañas del paso macedonio de Lojane, al norte del país, cerca de 10.000 albanokosovares expulsados de sus casas por las fuerzas serbias están esperando la mínima oportunidad para abandonar Kosovo y convertirse en otra fría cifra más de los deportados por el régimen de Belgrado. Tanto el alcalde del pueblo de Lojane como un responsable de ACNUR aseguraban ayer que hasta 10.000 personas podrían estar del "otro lado". A través de un albanokosovar que en los últimos días había cruzado por el mismo paso fronterizo obtuvieron el número de un teléfono móvil con el que contactaron con un hombre en territorio kosovar que aseguró que tanto él como miles de personas más llevaban días de camino y sólo esperaban poder acceder a Macedonia. Afirmó que una mujer había muerto de frío. Mientras tanto, en la plaza del pueblo esperan dos camiones de ACNUR repletos de mantas y ayuda de emergencia.
Esta madrugada comenzó la operación de evacuación. Una treintena de autobuses macedonios esperaban cerca de Lojane para trasladar a unos 3.000 refugiados a los campamentos de este país. Los primeros ocho vehículos cargados de deportados cruzaron la frontera cerca de las dos de la madrugada.