El Patronato de Donaña aprueba con condiciones la reapertura de Boliden

Los tres directores de organismos de protección del espacio natural de Doñana rechazaron ayer el informe favorable, pero con condiciones, que emitió el Patronato del Parque Nacional para la reapertura de las minas de Aznalcóllar. Este organismo avaló así el uso de una mina a cielo abierto abandonada como nuevo depósito de residuos mineros. Esta corta es la propuesta de Boliden, la empresa propietaria de la explotación, para sustituir a la balsa cuya rotura provocó el vertido tóxico en el Guadiamar, el pasado 25 de abril.

El Patronato del Parque Nacional de Doñana se reunió durante dos h...

Los tres directores de organismos de protección del espacio natural de Doñana rechazaron ayer el informe favorable, pero con condiciones, que emitió el Patronato del Parque Nacional para la reapertura de las minas de Aznalcóllar. Este organismo avaló así el uso de una mina a cielo abierto abandonada como nuevo depósito de residuos mineros. Esta corta es la propuesta de Boliden, la empresa propietaria de la explotación, para sustituir a la balsa cuya rotura provocó el vertido tóxico en el Guadiamar, el pasado 25 de abril.

El Patronato del Parque Nacional de Doñana se reunió durante dos horas y media en el centro El Acebuche, en pleno corazón del coto, a solicitud de la Consejería andaluza de Trabajo e Industria. La reunión comenzó con el boicoteo de los representantes de Ecologistas en Acción. Francisco Vilches, miembro de la federación verde, aseguró que la documentación le había sido remitida en la tarde del pasado martes, por lo que "resultaba imposible estudiarla con detenimiento".Esta era la segunda ocasión en la que el Patronato estudiaba la reapertura de la mina. En primera instancia, este organismo había resaltado las lagunas en la documentación de Boliden para rechazar el proyecto. Ahora, con el informe del Instituto Técnico Geominero de España (ITGE) sobre la mesa, el Patronato da finalmente un sí velado y con condiciones a la utilización de la vieja mina a cielo abierto, en la que ya se han vertido millones de toneladas de lodos tóxicos y tierra recogidos del río Guadiamar.

El dictamen, que no es vinculante para la decisión final de la Junta andaluza, establece que sólo se debería utilizar la corta hasta la cota cero metros sobre el nivel del mar, tal y como había aconsejado el ITGE. "Lo que ha hecho el Patronato es trasladar este informe a la Junta, porque ésta es la que debe decidir sobre la reapertura", explicó la ministra de Medio Ambiente y presidenta del Patronato, Isabel Tocino.

"Nos fiamos de los que más saben, los técnicos, y por eso emitimos este informe, porque lo esencial para el Patronato es garantizar este espacio natural", dijo. Este pronunciamiento contrastó con la opinión de los directores del Parque Nacional, Alberto Ruiz Larramendi (nombrado por el Ministerio), del Parque Natural, Javier Cobos, (designado por la Junta) y de la Estación Biológica, Miguel Ferrer. Los tres votaron en contra al entender que hay problemas a los que la empresa propietaria no ha dado respuesta.

"Boliden ha rechazado todas las alegaciones que se le han presentado y, además, no aclara la forma en que se va a abandonar la corta cuando acabe la explotación, ni tampoco ha elaborado un plan de emergencia, por lo que las garantías no nos parecen suficientes", dijo Ferrer. De esta forma, el Patronato dio su sí condicional con 19 votos a favor y tres en contra. Entre las posiciones favorables se incluyó la del consejero de Medio Ambiente, José Luis Blanco, que indicó que el estudio de impacto ambiental (el último informe preceptivo para la reapertura) estará listo "en un mes".