Rato anima la inversión española en China

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía español, Rodrigo Rato, quien realiza una visita oficial a China de cuatro días, expresó ayer al presidente chino el interés de España por impulsar las inversiones en el país asiático.

Entre las inversiones que España tiene intención de hacer en China, destacan los sectores de la construcción y de la horticultura, y en este último se estudia la posibilidad de hacer cultivos similares a los que se realizan en Almería con técnicas modernas.

Por su parte, el presidente del Gobierno chino, Jiang Zemin, reafirmó ayer a R...

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía español, Rodrigo Rato, quien realiza una visita oficial a China de cuatro días, expresó ayer al presidente chino el interés de España por impulsar las inversiones en el país asiático.

Entre las inversiones que España tiene intención de hacer en China, destacan los sectores de la construcción y de la horticultura, y en este último se estudia la posibilidad de hacer cultivos similares a los que se realizan en Almería con técnicas modernas.

Por su parte, el presidente del Gobierno chino, Jiang Zemin, reafirmó ayer a Rato, durante el encuentro que mantuvieron en Pekín, que su país apuesta por el euro y que prevé que un 20% de las reservas de divisas chinas se tendrán en la moneda única europea. Durante la reunión, Rato y Zemin hablaron sobre la próxima visita del presidente del Gobierno, José María Aznar, a China, que se realizará en el primer semestre de 1999.

Ambos dirigentes también hablaron sobre la entrada de China en la Organización Mundial de Comercio (OMC), lo que es apoyado por España una vez que China acepte sus derechos y obligaciones en el organismo internacional. Zemin afirmó que China quiere abrir su economía y estimó que no hay nada malo en que los inversores se enriquezcan en su país, ya que eso genera a su vez riqueza doméstica, pero apuntó que ese enriquecimiento debe hacerse de una manera legal. El presidente chino subrayó que su país va a seguir con su política de reformas económicas. Para Estados Unidos, esto significa muy lentamente.