EL CAMBIO EN MARRUECOS

"He estado muerto 18 años en el infierno de Tazmamart"

"He tenido una muerte gota a gota, a fuego lento en el infierno de Tazmamart durante 18 años y tres meses". El expreso político Ahmed Marzuki recalca obsesivamente los meses de su condena a la muerte en vida en una cárcel que, según el régimen marroquí, no existía."Era una celda cerrada, sin ventanas, sólo un hilo de luz muy débil entraba por un pequeño agujero abierto en el techo e iluminaba un pequeño espacio de unos 50 centímetros de diámetro que se desplazaba según la hora del día". El subteniente Marzuki fue condenado a cinco años de cárcel en 1971 por su supuesta participación en el golp...

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"He tenido una muerte gota a gota, a fuego lento en el infierno de Tazmamart durante 18 años y tres meses". El expreso político Ahmed Marzuki recalca obsesivamente los meses de su condena a la muerte en vida en una cárcel que, según el régimen marroquí, no existía."Era una celda cerrada, sin ventanas, sólo un hilo de luz muy débil entraba por un pequeño agujero abierto en el techo e iluminaba un pequeño espacio de unos 50 centímetros de diámetro que se desplazaba según la hora del día". El subteniente Marzuki fue condenado a cinco años de cárcel en 1971 por su supuesta participación en el golpe de Estado de Sjirat, que intentó derrocar al rey HassanII en un ataque contra su palacio de verano en la costa, muy cerca de Rabat.

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Tras dos años en la prisión de Kenitra, fue conducido junto con otros 58 militares implicados en la intentona al campamento de Tazmamart, en el desértico sur del país: bajo cero o a más de 40º a la sombra. Sólo la mitad de los prisioneros del pabellón de la muerte salieron con vida. O al menos no estaban muertos del todo. "Éramos seres más inferiores que los mosquitos, la vida humana no tenía valor", recuerda con dolor Marzuki. En septiembre de 1991, los supervivientes fueron llevados a un hospital.

"Intentaron devolvernos el aspecto humano, pero alguno caminaba ya a cuatro patas. Nos dijeron: "Vais a ser reintegrados en la sociedad, pero no debéis hablar de ello". Prometieron ayudarnos, pero luego se olvidaron. Lo que nos hicieron es una vergüenza para Marruecos, para la humanidad".

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