Un instituto de Torroella reduce horas lectivas por falta de comedor

La asociación de padres de alumnos (APA) del Instituto de Enseñanza Secundaria de Torroella de Montgrí (Baix Empordà) ha denunciado que el Departamento de Enseñanza todavía no ha encontrado una solución para poner en marcha el comedor escolar al que tienen derecho por ley los alumnos desplazados que acuden al centro. El consejo escolar del instituto se ha visto forzado a improvisar una jornada completa de mañana que vulnera la normativa escolar y en la que se pierden entre seis y ocho horas lectivas semanales. El problema del comedor escolar arranca de hace tres años, cuando se le otorgó l...

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La asociación de padres de alumnos (APA) del Instituto de Enseñanza Secundaria de Torroella de Montgrí (Baix Empordà) ha denunciado que el Departamento de Enseñanza todavía no ha encontrado una solución para poner en marcha el comedor escolar al que tienen derecho por ley los alumnos desplazados que acuden al centro. El consejo escolar del instituto se ha visto forzado a improvisar una jornada completa de mañana que vulnera la normativa escolar y en la que se pierden entre seis y ocho horas lectivas semanales. El problema del comedor escolar arranca de hace tres años, cuando se le otorgó la condición de centro de absorción, por la que debe impartir enseñanza a los alumnos de 12 pueblos de los alrededores. El primer año el Ayuntamiento cedió una sala del asilo de ancianos, el segundo se estableció un convenio con una fonda, y para este curso Enseñanza todavía no ha encontrado una solución para el centenar de alumnos que tienen derecho a este servicio. Un inspector de la Generalitat denegó las dos propuestas realizadas por el centro: un local fue rechazado por no reunir las condiciones físicas adecuadas y otro porque en el trayecto hasta él se debía cruzar una carretera. La portavoz de la APA, Mercedes Sánchez, explica que se podría habilitar un pequeño comedor para los alumnos de los primeros cursos de ESO, pero como comparten autobús con sus compañeros mayores están obligados a realizar sus mismos horarios. No es éste el único problema de este centro de 600 alumnos y 47 profesores. Sus dependencias están en tres locales: el antiguo instituto de bachillerato, unos pisos alquilados por Enseñanza en el centro del pueblo y unos módulos prefabricados situados a 1,5 kilómetros de los anteriores.

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