El bebé neozelandés desahuciado murió en casa

El bebé neozelandés que nació gravemente enfermo, y cuyos padres se opusieron a desconectar los aparatos que lo mantenían con vida, murió en los brazos de su madre y en su propia casa el sábado, horas después de abandonar la unidad de cuidados intensivos. Antes, los médicos del Hospital Nacional de Mujeres de Auckland, donde vivió el bebé desde que nació, recibieron de un juez la autorización para desconectarle, permiso que habían negado los padres.

La niña, que tenía ocho semanas, sufría parálisis cerebral y dos raras enfermedades (síndrome de Moebius, que afecta a los nervios craneale...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El bebé neozelandés que nació gravemente enfermo, y cuyos padres se opusieron a desconectar los aparatos que lo mantenían con vida, murió en los brazos de su madre y en su propia casa el sábado, horas después de abandonar la unidad de cuidados intensivos. Antes, los médicos del Hospital Nacional de Mujeres de Auckland, donde vivió el bebé desde que nació, recibieron de un juez la autorización para desconectarle, permiso que habían negado los padres.

La niña, que tenía ocho semanas, sufría parálisis cerebral y dos raras enfermedades (síndrome de Moebius, que afecta a los nervios craneales, y anormalidad de Poland, que impide la correcta formación de las extremidades) que le habrían impedido sobrevivir.

Archivado En