Fomento exige a Canarias suspender el concurso de TV si quiere tercer canal

Canarias no tendrá licencia para el tercer canal hasta que no se paralice el concurso por el que se adjudicará la gestión de su futura televisión autonómica a un operador privado, según ha advertido el Ministerio de Fomento al Ejecutivo regional. Esta decisión ha provocado gran malestar en la dirección de la Radiotelevisión Canaria y fue interpretada como "una injerencia en la autonomía" del archipiélago por el PSC-PSOE.

La advertencia de Fomento ha sido la respuesta, remitida esta misma semana por el Gobierno central al autonómico, a la petición realizada por el presidente canario Manu...

Canarias no tendrá licencia para el tercer canal hasta que no se paralice el concurso por el que se adjudicará la gestión de su futura televisión autonómica a un operador privado, según ha advertido el Ministerio de Fomento al Ejecutivo regional. Esta decisión ha provocado gran malestar en la dirección de la Radiotelevisión Canaria y fue interpretada como "una injerencia en la autonomía" del archipiélago por el PSC-PSOE.

La advertencia de Fomento ha sido la respuesta, remitida esta misma semana por el Gobierno central al autonómico, a la petición realizada por el presidente canario Manuel Hermoso reclamando la aprobación urgente del real decreto de tercer canal de televisión para las islas.La decisión de Fomento abre un nuevo capítulo en el pulso que ambas Administraciones mantienen en torno a la puesta en marcha de la Radiotelevisión Canaria (RTVC), cuyo concurso de adjudicación, en fase final, se resolverá previsiblemente en la primera quincena de septiembre.

En su escrito, Fomento alega que "el Gobierno canario incumple la ley de 1983", que prohíbe la transferencia bajo ninguna forma, total o parcial a terceros, ya que su modelo "representa una gestión indirecta del servicio".

Finalmente, el departamento que dirige Rafael Arias-Salgado concluye señalando que la paralización del concurso "abriría la posibilidad de poner fin al procedimiento contencioso-administrativo" iniciado por el recurso presentado contra aquél por la propia Administración central.

La decisión del Ministerio de Fomento parece responder al temor de que el mencionado recurso pudiera resolverse en contra de las tesis estatales, ya que una argucia de los responsables de RTVC -la convocatoria del concurso por el administrador único de la sociedad anónima Televisión Pública de Canarias, el propio director Jorge Bethencourt, y no por el Consejo de Administración- cerraría la vía contencioso-administrativa y obligaría a actuar en base a la legislación mercantil.

Tribunales

Fuentes de Radiotelevisión Canaria anunciaron ayer "la remisión urgente de la carta del Ministerio de Fomento a los servicios jurídicos del Gobierno, por creer que el Gobierno central pudiera invadir competencias autonómicas". En este sentido, Jorge Bethencourt declaró ayer a Europa Press que "en este país quienes deciden quién está o no dentro de la ley son los tribunales de justicia", por lo que "una administración no puede decirle a otra que ha violado las normas".El socialista Antonio Márquez interpretó la decisión de Fomento como una "injerencia clarísisma en la autonomía de Canarias". Para el secretario de Organización del PSC-PSOE, el escrito del ministerio traduce "el afán de Arias Salgado de manipular a toda costa los medios de comunicación". Márquez también criticó al PP por "estar llevando el asunto del tercer canal canario a límites conflictivos vergonzosos". Por su parte, el PP calificó de "gesto de buena voluntad" la intención de Fomento de no conceder el tercer canal si no se suspende primero el concurso de adjudicación. La creación de la televisión canaria ha provocado serias desavenencias a nivel político, tanto frente a la Administración central como entre los propios socios -Coalición Canaria y PP- del Gobierno regional.

En la fase final del concurso para adjudicar la gestión del futuro canal autonómico sólo han sido aceptadas las ofertas de las empresas Productora Canaria de Televisión, participada por Sogecable y empresarios canarios, y DTH Europa, del grupo mexicano Televisa.